Lo desdichado que seríamos si fuéramos inmortales
Por Antonio Zamora
Sin duda, el trabajo de más de quince años realizado por Manolo Jiménez Salinas en las calles de colonias, barrios y ejidos de Coahuila ha sido fundamental y respalda su propuesta política y social…
El trabajo político del candidato a la gubernatura de Coahuila por la Alianza Ciudadana por la Seguridad está basado en el sentir y pensar de la gente que conoció desde que inició su carrera…
Fue presidente de colonia, regidor, diputado, dos veces presidente municipal de Saltillo, diputado local y Secretario de Inclusión y Desarrollo Social del Gobierno del Estado…
En su proyecto de gobierno destacan los programas sociales y al mismo tiempo vivir con seguridad, tener acceso a mejores empleos que es la herramienta para que los coahuilenses prosperen…
Durante sus primeros días de campaña, Jiménez Salinas ha sido muy claro en su mensaje de unidad al señalar que, dos puntos y aparte:
“Aquí en Coahuila no se trata de elegir entre izquierda o derecha. ¡Aquí el cambio es pa´delante!…
Al referirse al tema de la seguridad ha mencionado que continuará con el blindaje en coordinación con los tres órdenes de gobierno para que el estado siga siendo de los más seguros del país…
Además, el Consejo Ciudadano Coahuila 2030 y el Consejo Ciudadano de Contraloría serán ejes para que su administración sea honesta, transparente y con rendición de cuentas…
Y esto sucederá porque habrá acceso a los ingresos, egresos, compras y licitaciones estatales, oséase cuentas claras amistades largas…
Por otro lado, así le ponen los reporteros, las trece centrales eléctricas que el fondo México Infraestructura Partners (MIP) compró a Iberdrola resultan caras por ser instalaciones viejas…
Aparte su vida útil fenece en pocos años, por lo que sin duda fue una mala compra del gobierno de la cuarta transformación…
El pago de seis mil millones de dólares por las trece centrales resulta costoso considerando que las dos terceras partes de las centrales tienen entre diez y 25 años de operación, mientras que el resto se construyó entre 2017 y 2019…
Que si esto…
Que si aquello…
Que si lo otro…
Más cierto es que en Coahuila se cuenta con las condiciones necesarias para tener un proceso electoral en paz y tranquilo…
Y tan es así que desde hace algunos días se puso en marcha una comisión local de blindaje electoral…
El siguiente fragmento es parte de una conversación real entre Jorge Luis Borges y Juan Rulfo que es una joya, esperamos lo disfruten, otros dos puntos y aparte:
RULFO: Maestro soy yo, Rulfo. Qué bueno que ya llegó. Usted sabe como lo estimamos y lo admiramos…
BORGES: Finalmente, Rulfo. Ya no puedo ver a un país, pero lo puedo escuchar. Y escuchó tanta amabilidad. Ya había olvidado la verdadera dimensión de esta gran costumbre. Pero no me llame Borges y menos maestro, dígame Jorge Luis…
RULFO: Qué amable. Usted dígame entonces Juan…
BORGES: Le voy a ser sincero. Me gusta más Juan que Jorge Luis, con sus cuatro letras tan breves y tan definitivas. La brevedad ha sido siempre una de mis predilecciones…
RULFO: No, eso sí que no. Juan, cualquiera, pero Jorge Luis, sólo Borges…
BORGES: Usted tan atento como siempre. Dígame ¿Cómo ha estado últimamente?
RULFO: ¿Yo? Pues muriéndome, muriéndome por ahí…
BORGES: Entonces no le ha ido tan mal…
RULFO: ¿Cómo así?
BORGES: Imagínese don Juan, lo desdichado que seríamos si fuéramos inmortales…
RULFO: Si, verdad. Después anda uno ahí muerto haciendo como si estuviera vivo…
BORGES: Le voy a confesar un secreto. Mi abuelo, el general, decía que no se llamaba Borges, que su nombre verdadero, era otro secreto. Sospecho que se llamaba Pedro Páramo. Yo entonces soy una reedición de lo usted escribió sobre los de Comala…
RULFO: Ahora si ya me puedo morir en serio…
Tomado de la Revista literaria “La Noche de las Letras” …
Nos leemos mañana…