La Bendición de Cascos: Entre tradición y desorden en Parras

Ricardo Martínez

Este fin de semana, el municipio de Parras de la Fuente fue el escenario de la vigésima edición de la tradicional Bendición de Cascos, encuentro que reunió a miles de motociclistas en la Explanada de la Unidad Deportiva. La celebración, que combina fe y camaradería entre los asistentes, también dejó una imagen negativa en la comunidad local.

A pesar de la atmósfera festiva, la jornada estuvo marcada por incidentes que generaron malestar entre los residentes. Las calles del centro histórico fueron utilizadas como baños públicos, y se registraron excesos de alcohol y riñas que empañaron el cierre del evento.

La imagen del centro amaneció devastada, con basura esparcida y olores desagradables provenientes de edificios religiosos, donde algunos asistentes decidieron orinar, dejando un panorama lamentable en una localidad reconocida por su riqueza cultural y espiritual.

En la actividad del 25 de enero se presentaron varios artistas, pero la organización fue objeto de críticas. Los ciudadanos expresaron su descontento por la falta de coordinación y fallas técnicas en sonido y luces durante las presentaciones.

En un momento destacado de la celebración, Miriam Salazar, una motociclista originaria de Guadalupe, Nuevo León, ganó la motocicleta rifada en el marco de la Bendición de Cascos. Salazar, que es independiente y no pertenece a ningún club, se convirtió en una de las protagonistas del encuentro.

Por otro lado, la recolección de basura fue iniciada por la administración municipal encabezada por el alcalde Fernando Orozco Lara desde tempranas horas del domingo. Los ciudadanos parrenses expresaron su agradecimiento hacia los trabajadores municipales por su dedicación y disposición ante la situación.

La celebración de la Bendición de Cascos, aunque llena de tradición y fervor, también expone la necesidad de una mejor organización y respeto hacia la comunidad local, que anhela preservar la belleza y limpieza de su histórico entorno.