Dobleces
El coleccionista de adversarios
Israel Mendoza Pérez
@imendozape
A lo largo de su carrera como activista y político de izquierda, Gerardo Fernández Noroña se dedica a la infatigable colección de adversarios. Sin embargo, no son sólo los, ahora, opositores a la cuatroté. Dentro de ella tiene una extensa lista de desencuentros. Ahora, su fricción la enfiló contra el coordinador de los morenistas en San Lázaro, Ricardo Monreal.
Al senador Gerardo Fernández Noroña le sobra tiempo para armar confabulaciones y choques dentro de la cuatroté. Aunque hay síntomas de un desgaste acelerado de su imagen, se resiste a los cambios que le requiere su posición como representante de una de las fuerzas políticas en el poder. El radical de izquierda que confrontaba al priísmo, ahora, se enfrenta con morenistas y las bases del PT.
Noroña queda como un advenedizo del PT. Quedó probado cuando los petisas de base, lo abuchearon. Su salto del PRD al Partido del Trabajo pareció un paso normal; sin embargo, no es militante y es, a decir de sus críticos internos, un personaje incómodo que a estas alturas trae negativos como nombre y sus críticas escurren sobre las siglas del PT y esas señales se traducen en una separación inevitable.
La más reciente fue el señalamiento que el diputado Ricardo Monreal Ávila frenó políticamente el avance del proceso de desafuero contra el senador del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas. Remató el reproche: “A mí me dijo Ricardo Monreal: Sí, vamos a proceder. Me lo dijo en mi cara hace mínimo tres semanas y no mueve un dedo”.
Fernández Noroña se encuentra en debilitamiento político. Con las bases del partido de Alberto Anaya tuvo una confrontación en la que pidieron que se saliera de una asamblea. Esa es una de tantas señales que su capital político ya no es útil.
El reciente caso de Gerardo Fernández Noroña y su casa de 12 millones de pesos, en Tepoztlán, su viaje en aérotaxi y ahora presumir el cobro de pensión para adultos mayores por 6 mil 200 pesos al bimestre, lo ponen de nuevo en el reflector. Es legal su pensión de adulto mayor, pero inmoral desde el momento en que su dieta mensual ronda más de 100 mil pesos.
Desde 2011 trae conflictos, María Alma Velázquez Rivera, exdiputada suplente de Fernández Noroña en aquel año exhibió que Fernández Noroña se olvidó de los electores, sólo pidió el voto y jamás regresó al 19 distrito federal a cumplirles a los electores sus promesas y así dejó de hacer trabajo territorial.
Sin embargo, en estas confrontaciones, Alberto Anaya opta por dejar que los escándalos se apaguen con el tiempo. El PT se encuentra en franca rebeldía con Morena. Aunque Fernández Noroña se encuentra en una zona de flotación riesgosa.
Con Monreal se encuentra en choque, con la militancia del PT también. Fernández Noroña está en una situación complicada y no la admite. Su ceguera de poder lo impide. Sus modos incomodan dentro y fuera de la cuatroté. Eso es lo riesgoso, el pleito interno con un movimiento político que rechaza el conflicto tribal y del que no se ha podido desprender el senador Noroña.
