Lo que no se dijo en el sexto informe
Por Antonio Zamora
El rector de la Universidad Autónoma de Coahuila, Octavio Pimentel Martínez, estará en Monclova mañana…
Los Foros Violeta es un compromiso de campaña y se rigen por seis ejes temáticos, dos puntos y seguido: Investigación y Docencia, Derechos Humanos y Género, Salud, Bienestar e Inclusión…
También Medio Ambiente e Infraestructura Universitaria y Mujeres Universitarias Emprendedoras…
Este tipo de actividades llegan a fortalecer la agenda de las mujeres UAdeC al convertirse en un espacio de expresión y diálogo…
Pimentel Martínez presidirá el evento que se realizará en la Sala de Seminarios de la Unidad Norte…
Ese mismo día, el presidente municipal, Mario Alberto Dávila Delgado entregará una pavimentación que beneficiará a vecinos…
A continuación, lo que no se dijo en el sexto informe de gobierno del Mesías…
1.- Endeudé al país y se lo entregué a los malos…
2.- Destruí el sistema de salud…
3.- Polaricé a la sociedad…
4.- Ahuyenté inversiones y capitales…
5.- Utilicé a los pobres y los hice más pobres…
6.- Batí récord en asesinatos más menos 200 mil…
7.- Protegí al CO y aumenté la inseguridad…
8.- Me peleé con España, Ecuador, Canadá, USA y países de Europa…
9.- Protejo y soy amigo de dictadores…
10.- Construí obras faraónicas inservibles…
11.- Talé millones de árboles…
12.- Destruí organismos autónomos…
13.- Permití el enriquecimiento de mis, bueno, esos…
14.- Cometí el mayor fraude electoral el dos de junio…
15.- Juré respetar la Constitución y la violé todos los días…
La parábola del samurái, dos puntos y aparte:
En Japón, en un pequeño poblado no muy lejos de la capital, vivía un viejo samurái…
Un día, mientras instruía a sus aprendices, se le acercó un joven guerrero, muy conocido en el lugar por su rudeza y crueldad…
Su forma de ataque favorita era la provocación. Para ganar, solía sacar de sus casillas a sus contrincantes con insultos y palabras hirientes…
Cuando estos, irritados, comenzaban a cegarse por la ira y a cometer errores en combate, el joven guerrero aprovechaba la oportunidad para ganarles con facilidad…
Fue entonces cuando el joven guerrero empezó a insultar al viejo. Le lanzaba piedras, le escupía y le decía las peores palabras que conocía…
Sin embargo, el viejo se quedó ahí, haciendo oídos sordos y sin dar pábulo a las hirientes palabras y actos vejatorios del guerrero, como si no ocurriese nada y siguiendo con sus enseñanzas…
Al final del día, el joven guerrero, cansado y enfurecido, se marchó a casa…
Los aprendices, sorprendidos de que el viejo samurái hubiese soportado tantos insultos, le preguntaron, otros dos y aparte:
— ¿Por qué no peleaste con él? ¿Tenías miedo de ser derrotado? El viejo samurái respondió:
Si alguien se acerca con un regalo, pero tú no lo aceptas, ¿a quién pertenece el regalo?
— A quién lo traía—, respondió uno de sus discípulos…
— Bien, pues lo mismo ocurre con el odio, la envidia y las malas palabras. Hasta que no las aceptas, le pertenecen a aquel que las traía…
Nos leemos mañana.