Paralaje

“Devolver la humanidad…”

Hugo Díaz Aguilera

Muchos conocemos la frase “es más fácil destruir que construir”, pero muy pocos conocen la reflexión: “Mete más ruido en el bosque un árbol que está cayendo que cien que están creciendo”, de Mario Alonso Puig. Esto es justo lo que ha pasado en el bello Pueblo Mágico de Melchor Múzquiz, un pueblo de mucho aprecio para la región Carbonífera.

Se llegó el momento en que Laura Jiménez Gutiérrez, alcaldesa de ese municipio, rindió cuentas a la ciudadanía con relación a su primer año al frente de la administración municipal; evento al que, de entrada, y sin ser cosa menor, acudió el gobernador de Coahuila, Manolo Jiménez. Pero junto con Manolo se dieron cita, para acompañar a la “Gachupina”, diversos grupos de la sociedad civil en señal inequívoca de aprobación a la gestión de Laura Jiménez.

Estuvieron presentes habitantes de varias colonias del municipio; representantes de las etnias mascogos y kikapúes; exalcaldes; empresarios y pequeños comerciantes; así como deportistas, sin faltar funcionarios municipales y estatales. Es decir, el arropamiento que recibió la “Gachupina” habla de la conexión y empatía que ha logrado con los muzquences.

Fue un informe de trabajo dividido en cuatro ejes, de los cuales podría darle cuenta uno por uno —lo que se hizo en Múzquiz limpio, Múzquiz en acción, Múzquiz seguro, etcétera—; sin embargo, hoy los tecnicismos y las cantidades de dinero invertido son lo de menos cuando se observa la voluntad y la fuerza de trabajo para servir realmente a la gente.

Todos conocen cómo recibió Laura Jiménez el municipio: sin infraestructura, un Múzquiz dividido, un Melchor Múzquiz herido, un oasis del norte lastimado, por decir lo menos. Si algo resaltó la alcaldesa fue la ayuda con la que siempre ha contado para sacar a Múzquiz adelante, de la mano de Manolo Jiménez y de “la fuerza de nuestra gente”.

En su intervención, el gobernador no solo habló de lo que, junto con los muzquences y la alcaldesa, se ha logrado; también anunció la construcción de un parque industrial en el oasis del norte, la continuidad en el tema del agua potable y, de paso, un parque industrial en las inmediaciones de Nueva Rosita y Sabinas. Pero, sobre todo, apuntó que para Múzquiz esto apenas comienza y que lo mejor está por venir.

En la Carbonífera y en Coahuila sabemos los tres años de destrucción continua que vivió este Pueblo Mágico. Pero, aún más preocupante que los basureros clandestinos, las chatarras del parque vehicular, las calles sin pavimentar y la oscuridad financiera en la que recibió la administración Laura Jiménez, fue el Múzquiz dividido que le dejaron.

Hoy la tarea asumida por Manolo y la Gachupina radica en lo dicho por el mandatario estatal: “Aquí no dividimos, no peleamos, no polarizamos…”. Pero, sobre todo, en lo que la alcaldesa de Múzquiz ha convertido en su tarea prioritaria: “Devolver la humanidad a nuestra gente”.