Un fracaso, estrategia de “abrazos, no balazos”
													Raúl R. de Santiago
La diputada y presidenta de la Junta de Gobierno del Congreso local, Luz Elena Morales, señaló que hechos como el asesinato del alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, ocurrido el pasado fin de semana, son una consecuencia directa de la fallida estrategia de seguridad implementada durante el sexenio pasado, conocida como “abrazos, no balazos”.
Morales expresó que este tipo de sucesos lamentables evidencian cómo dicha política permitió el crecimiento del crimen organizado y debilitó las capacidades del Estado para garantizar la seguridad de los ciudadanos.
“Alcaldes, activistas sociales, empresarios, en el caso de Michoacán, pues han sido asesinados. Sin duda las estrategias de seguridad en su momento, la de abrazos, no balazos, pues ahí se ve el impacto donde lamentablemente dejaron crecer”, comentó.
La legisladora reconoció que la actual administración federal, encabezada por la presidenta Claudia Sheinbaum, está realizando esfuerzos por corregir el rumbo y construir un nuevo modelo de seguridad que sí brinde resultados.
“La presidenta está haciendo estos esfuerzos, pero creo que también los gobernadores de su propio partido la están dejando sola”, advirtió.
Morales urgió a las autoridades estatales a asumir con responsabilidad su papel en la construcción de la paz, y llamó a establecer una coordinación real entre los tres niveles de gobierno.
Dijo que las estrategias deben centrarse no sólo en la contención, sino en la prevención y el fortalecimiento de las instituciones locales.
“La violencia no distingue colores ni cargos. No se pueden estar perdiendo más vidas. Y no hablo sólo de funcionarios, hablo de cualquier persona en manos del crimen organizado”, enfatizó la diputada.
		