Nuevas Masculinidades, herramienta contra la violencia de género
Eliminar los estereotipos y roles impuestos por la cultura que existe en el país, es una de las acciones primordiales que podrían acabar con la violencia de género. Lo anterior, mediante programas como las Nuevas Masculinidades que buscan erradicar el machismo en la sociedad, a través de la igualdad entre hombres y mujeres
JESSICA ROSALES
Actualmente las acciones de colectivos e instituciones se enfocan primordialmente a la protección de los derechos de las mujeres y sancionar actos de violencia; sin embargo, existen programas dedicados a trabajar desde la raíz del problema, mediante tratamientos con el agresor que se refiere a las Nuevas Masculinidades.
El modelo de hombre que por generaciones es avalado por la sociedad, es aquel que legitima su poder y la capacidad frente a otros, principalmente mujeres, además de buscar reprimir la sensibilidad y exigirle ser el más competitivo, lo que incide en la violencia de género.
En Sexto Día, de Grupo Región expertos hablan de cómo el machismo, los estereotipos y roles dejan en desventaja a la mujer y al propio hombre, pero además influye en una conducta agresiva del hombre empujado por la sociedad.
La diputada local y coordinadora de la Comisión de Igualdad y Género en el Congreso del Estado, Luz Elena Morales Núñez, reconoce que es necesario analizar qué ocurre con los generadores de violencia y las causas que motivan esta conducta.
“Nos hemos encargado mucho las feministas de hablar de los rezagos históricos de la discriminación, de la evidencia, que es evidente contra las mujeres y que hemos estado levantándonos como se ha visto en las manifestaciones en pie de lucha, pero qué hacer como sociedad, qué hacer en el día a día y no hemos visto el otro lado de los hombres”, señala.
Morales Núñez añade que existen micromachismos no sólo de los hombres sino también en mujeres encargadas de la educación de sus hijos que concluyen con roles y estereotipos difíciles de erradicar en la edad adulta.
“Nos hemos encargado de decirles el cómo no violentar a la mujer y respetar su cuerpo, pero nos ha faltado el cómo sí, y las Nuevas Masculinidades justamente como los hombres pueden vivir su hombría desde un punto de vista sano y cómo desmitificar que a quienes les gusta ir por sus hijos no son mandilones ni menos hombres”, señala.
De acuerdo con la más reciente Encuesta Nacional de Género se preguntó a la población en general cuál es la primera palabra que asocias con mujer, respondieron ‘maternidad’; para el caso del hombre fue ‘trabajo’; ¿cuál es la mayor ventaja que tiene la mujer?, las tres primeras respuestas fueron: ‘dar vida’, ‘cuidar a los otros’, y que ‘les ceden el asiento’.”
Morales Núñez, destaca que las Nuevas Masculinidades buscan cómo concientizar a los hombres de que también a su género el machismo les afecta y que existen mujeres que tienen esta práctica, por lo que expresar sus emociones no es algo negativo ni que los deja vulnerables.

¿Qué motiva a los hombres a actuar de manera violenta?
Aunque se piensa que todos los hombres violentos tienen esa conducta porque vienen de familias en las que sufrieron agresión, no en todos los casos se trata de este patrón, pues muchos de ellos generan esa forma de resolución de problemas por la sociabilización y roles que les ha impuesto la sociedad.
Daniel Iván Leza Cepeda, psicólogo adscrito a la unidad de control y gestión de la Fiscalía de Investigaciones Especializadas, atención y protección a víctimas y testigos, señala que muchos de los casos de agresores atendidos se observan que son personas que han sido forzadas a lo largo de su desarrollo a adquirir una posición de autoridad.
“Son personas normales, que tienen un patrón de sociabilización como cualquier otra persona, pero la diferencia es que ellos están en un entorno que le otorga al hombre derechos y sentido de autoridad, que su opinión es la que vale y la que debe conducir una familia”, explica.
Destaca que es a través de la Unidad de Medidas Cautelares que se obliga a los agresores a tomar tratamientos para luchar en contra de la violencia, cuando son parte de un proceso legal, lo que les permite seguir su proceso en libertad.
Considera que las sanciones como privación de la libertad y otros castigos podrían ser, en algunos casos, contraproducentes, por lo que desde hace dos décadas se trabaja en el tratamiento psicológico de quienes generan violencia para su rehabilitación.
“No se trata únicamente de que la persona aprenda a respirar y contar hasta diez, y a contener el enojo, hay que distinguir, no es un tratamiento que tenga que ver con el control de la ira sino con el cuestionamiento de todas las pautas de interpretación y actividad del mundo que los sujetos han adquirido y los han llevado a la conducta violencia como un instrumento de resolución de conflictos”, expone.
Añade, “encontramos una socialización de género muy marcada, en la cual, los roles, los estereotipos están muy marcados, y pocas habilidades para relacionarse con el medio, dependencia respecto a la mujer y pocas habilidades para el autoconocimiento y expresión afectiva”.
El psicólogo de la Fiscalía General de Coahuila, añadió que también encontraron en los casos de agresores, figuras paternales violentas o ausencias paternales que también representa una forma de maltrato, además de que en este tipo de situación no existe un estatus social específico.
Roles y estereotipos influyen en la generación de violencia
De acuerdo con el INEGI, en Coahuila en el 72 por ciento de los hogares tiene una jefatura masculina, son los hombres los proveedores por lo que los estereotipos les señalan que por esta responsabilidad tienen poder y posibilidad de mandato en la casa superior a la de su pareja.
La diputada Luz Morales destaca que existen varios tipos de ausencia no solo aquella representada por el padre que no está presente en la familia, sino aquellos que trabajan todo el día y delegan en la mujer la atención de las necesidades emocionales de los hijos por lo cual no se practica la paternidad afectiva.
Consideró que aquellos papás que van por sus hijos a la escuela o se hacen cargo de las tareas de la casa no son bien vistos por la sociedad, son criticados y esto afecta la autoestima del hombre.
Daniel Iván Leza, psicólogo de la Fiscalía manifiesta que el hombre se coloca en una posición compleja que le implica renunciar a privilegios de poder, y además revela que la mayoría de los agresores que llegan a estos tratamientos se sienten víctimas porque son percibidas como monstruos por su conducta y se muestran a la defensiva.
Es por ello, que explica la importancia de atender estos casos desde reconocer su humanidad y mostrarles la importancia de un cambio, pues quienes ejercen esta violencia, atendidos en estos programas, muestran dolor y arrepentimiento genuino.
“Ofrecemos una perspectiva contrastante donde es tratado como una persona, y la posibilidad desde la psicoterapia en aquellos que son candidatos, ya que hay perfiles psicopáticos que no van a funcionar y requieren de tratamiento psiquiátricos. Vamos reforzando los indicios de motivación para el cambio y cuestionamos su posición de víctima para que se den cuenta de lo que está ocurriendo y cómo afecta su vida y su entorno”, indica.
Siete de cada diez mujeres sufren violencia; el hombre es el principal agresor
En México y en Coahuila, 7 de cada 10 mujeres mayores de 15 años, en algún momento de su vida han sufrido algún tipo de violencia, ya sea psicológica, física, económica y sexual.
Explicó que, aunque las cifras apuntan que hay más hombres asesinados, la diferencia es que el delito se comete por otras circunstancias no por su condición de género y el responsable es otro hombre en la gran mayoría de las ocasiones.
Es así como las Nuevas Masculinidades pueden contribuir a eliminar los estereotipos y por lo tanto evitar conflictos que lleguen a la violencia por considerar que lo correcto, según la sociedad, la familia y las tradiciones es que actúe de forma agresiva para defender un poder mal entendido y que no permite la igualdad.
RETOS DE UNA MASCULINIDAD
Ejercer paternidad positiva
Equilibrar labores domésticas y laborales
Cuidar la salud
Eliminar violencias
TAMBIÉN ES DE HOMBRES
Demostrar cariño a mis seres queridos.
Pedir ayuda.
Decidir mi identidad sexual y vivir mi sexualidad libre con responsabilidad.
Entender la importancia del consentimiento. No es no.
Compartir las decisiones, los gastos y logros del hogar con tu pareja.
Disfrutar el crecimiento de tus hijas e hijos con amor.
Asumir tus responsabilidades paternas, criando con amor a tus hijos e hijas.
