Aumenta abandono de adultos mayores

LESLIE DELGADO, GUADALUPE PÉREZ, JESSICA ROSALES
La omisión de cuidados hacia personas adultas mayores ha dejado de ser un caso aislado para convertirse en una constante en la que se observa incremento de casos. En los primeros cuatro meses de 2025, la Unidad de Integración Familiar (UNIF) ha atendido más de 65 casos tan solo en Saltillo, lo que equivale a un promedio de cuatro reportes por semana.
La cifra ya representa un aumento con respecto al año anterior, cuando se registraron 92 casos en total, y pone en evidencia la fragilidad de las redes de apoyo familiar en una etapa de vida que exige acompañamiento, atención médica, alimentación y cuidado emocional.
A esta realidad se suma un panorama nacional alarmante: en México, 1 de cada 6 adultos mayores sufre algún tipo de maltrato, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, y al menos 14.6 % de las mujeres mayores de 60 años ha sido víctima de violencia dentro del hogar, según datos del Inegi.
En los últimos 30 años México ha tenido un crecimiento en la población de adultos mayores. De acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) de 1990 al 2020 la población de 60 años y más, pasó de 5 a 15.1 millones, que representan 12% de la población.
En Coahuila, según el Inegi hay aproximadamente 312 mil personas mayores de 60 años. Se estima que entre 25 mil y 58 mil adultos mayores podrían estar en riesgo, sin que existan registros oficiales estatales que permitan dimensionar con precisión la magnitud del problema.
Autoridades como el DIF Coahuila y el Congreso del estado analizan cambios legales que fortalezcan la protección jurídica de los adultos mayores y sancionen con mayor severidad a quienes los abandonan, aun teniendo la responsabilidad de cuidarlos.
UNIF canaliza 4 casos por semana de omisión de cuidados en adultos mayores
La titular de la Unidad de Integración Familiar (UNIF) en Saltillo, Patricia Moreno, informó que durante lo que va de 2025 se han atendido más de 65 casos de omisión de cuidados en adultos mayores con corte al mes de abril.
Esta cifra, ya representa un ligero incremento en comparación con los 92 casos registrados al cierre de 2024, lo que sugiere que la tendencia al alza podría continuar si no se refuerzan los mecanismos de prevención y atención.
Estas cifras reflejan una situación preocupante en la capital coahuilense, donde los reportes de personas mayores en estado de abandono o descuido por parte de sus familiares son cada vez más frecuentes.
“Lamentablemente, en muchos casos los familiares no se están haciendo responsables. Nos encontramos con personas mayores solas, sin atención médica y en condiciones vulnerables”, indicó.
Explicó que en cuanto se se detecta un caso de posible omisión de cuidados, UNIF trabaja en coordinación con el DIF municipal, particularmente con el área de atención a adultos mayores. El procedimiento consiste en localizar a los familiares, generar una cita a través del DIF y, posteriormente, analizar el caso. Si se confirma la omisión, se emite un oficio para intervenir y brindar atención al adulto mayor.
Esta colaboración interinstitucional busca asegurar que las personas mayores reciban el apoyo que necesitan, sobre todo en lo relacionado con atención médica, alimentación o asistencia legal.
Puntualizó que en promedio se canalizan alrededor de tres casos por mes, lo que ha permitido alcanzar la cifra de 65 atenciones desde enero. Aunque el número puede variar, se mantiene un flujo constante que evidencia la persistencia del problema en la ciudad.
“Son casos que requieren acompañamiento, seguimiento y muchas veces una intervención urgente. La omisión de cuidados no solo implica abandono, sino también la falta de atención médica, higiene, alimentación y supervisión básica”, señaló.
Uno de los mayores retos que enfrenta la UNIF ocurre cuando no se logra contactar a ningún familiar, o cuando estos se encuentran fuera de la ciudad. En esos casos, se busca apoyo a través de contactos alternos.
“Tratamos de conseguir números de contacto. A veces aparece algún sobrino, hermano o incluso un vecino que pueda apoyar. Pero si el adulto mayor necesita atención médica, debe haber alguien que firme los consentimientos, lo que complica el proceso si no hay responsables disponibles”, explicó.
Finalmente, hizo un llamado a las familias a no desentenderse del cuidado de los adultos mayores. Aunque reconoció que las obligaciones laborales dificultan estar presentes todo el tiempo, insistió en la importancia de buscar alternativas responsables.
“Hay que ser conscientes que nuestros adultos mayores dieron mucho por nosotros. Si no puedes estar con ellos, busca a alguien de confianza que los supervise, o asegúrate que un vecino esté al tanto. No debemos dejarlos solos ni quitarles la dignidad que merecen”, dijo.
Se analiza tema legal: DIF Coahuila
La problemática del abandono de adultos mayores ya se analiza y en busca de resolverlo, la presidenta honoraria del DIF Coahuila Liliana Salinas, informó que ya tuvo una reunión con la presidenta del Congreso local para ver el tema legal y atender está situación más puntual.
El abandono de adultos mayores es una situación en la que se encuentran muchas personas de la tercera edad, aún cuando cuentan con familia, sin embargo algunos se debe a que realmente ya no tienen un familiar que les sobreviva.
Sin embargo, en la promesa situación donde si tienen familia y aún así dejan a la deriva a los abuelitos, ya se han tomado cartas en el asunto para protegerlos y por las vías legales sancionar a quienes los han descuidado, al respecto indicó que tuvo un acercamiento con Luz Elena Morales presidenta del Congreso Local.
“Precisamente tuve una plática con la presidenta eh estamos está revisando qué es lo que hay, qué es lo que está vigente para fortalecerla. Definitivamente sí tiene que ser. Yo creo que como familia o sea, como familia tenemos que tener la responsabilidad de nuestras personas mayores, así como de nuestros niños y niñas”, aseveró.
Indicó que en su opinión se tendrá un mejor estado y sociedad si se fomenta este tipo de responsabilidades, la unión familiar, el fortalecer los entornos familiares hará que se cuenta con familias más unidas, fuertes y responsables.
“Nosotros como DIF no hacemos la legislación, tenemos que ir con el Poder Legislativo, entonces estuvimos con la presidenta, con la con la diputada Luz Elena y en conjunto la estamos revisando (la ley) para ver qué es lo que hay y qué no es lo que nos faltaría para poder reforzar.”
El objetivo de revisar las leyes y regular la aplicación de sanciones en contra de quienes abandone a un abuelito, sigue en proceso por lo que se espera en próximas fechas tener un resultado al respecto.
Violencia contra adultos mayores afecta a 1 de cada 6 en México, revela la OMS
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH 2021), 14.6 % de las mujeres mayores de 60 años reportó haber sufrido algún tipo de violencia dentro del entorno familiar en México.
Por su parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que 1 de cada 6 adultos mayores a nivel mundial ha sufrido maltrato, ya sea físico, psicológico, económico o por negligencia. En el caso de México, estudios citados por el Instituto Nacional de Salud Pública indican que entre 8.1 % y 18.6 % de los adultos mayores han experimentado algún tipo de abuso, porcentaje que podría elevarse a 32 % en personas con dependencia funcional.
Estas cifras sugieren que en Coahuila entre 25 mil y 58 mil adultos mayores podrían estar en situación de maltrato, sin que existan registros oficiales que documenten el fenómeno a nivel local.
Las consecuencias no se limitan a daños físicos; el impacto emocional y psicológico incluye depresión, ansiedad, aislamiento social y pérdida de la autonomía, lo cual agrava su vulnerabilidad, especialmente en contextos donde falta acceso a redes de apoyo, centros especializados o servicios de atención integral.
A nivel nacional y local, instituciones como el Inapam y el DIF cuentan con líneas de atención, asesoría jurídica y acompañamiento para víctimas, sin embargo, especialistas han advertido que los mecanismos de denuncia son insuficientes o desconocidos por la mayoría de las personas mayores.
La OMS ha propuesto una agenda global a través de la “Década del Envejecimiento Saludable 2021–2030”, con ejes como la creación de entornos seguros, políticas públicas activas y sistemas efectivos de reporte y atención a víctimas.
Castiga Coahuila con cárcel el abandono y maltrato a adultos mayores
El maltrato, abandono y descuido hacia personas adultas mayores es un delito en Coahuila, sancionado con penas que van desde los tres meses hasta los dos años de prisión, además de multas y la pérdida de derechos familiares sobre la víctima.
El artículo 211 del Código Penal del estado establece que cualquier persona que, teniendo la obligación legal de cuidar a un adulto mayor o persona incapaz de valerse por sí misma, incurra en acciones de abuso, explotación, aislamiento, violencia, hacinamiento o desalojo, será sancionada penalmente. La ley contempla incluso la inducción a estas conductas como delito.
Cuando el abandono provoca lesiones que tarden más de quince días en sanar, se aplican sanciones por concurso de delitos. Si las condiciones derivan en un peligro concreto de muerte para la víctima, el responsable puede ser juzgado por tentativa de homicidio.
Además, si el agresor es familiar directo (ascendiente, descendiente en línea recta, cónyuge, compañero civil, tutor o tutora), la sanción incluye la pérdida de la patria potestad, la tutela, los derechos alimentarios y los derechos sucesorios respecto a la víctima, así como la suspensión de otros derechos familiares por uno o dos años.
El mismo artículo autoriza al Ministerio Público a dictar medidas de protección inmediatas cuando se estime que el imputado representa un riesgo inminente para la víctima, conforme al Código Nacional de Procedimientos Penales.
Por su parte, el artículo 212 castiga con tres a seis meses de prisión a quien abandone a una persona incapaz —incluyendo adultos mayores— en una institución o con terceros que no hayan aceptado su cuidado. Esta disposición aplica para quienes tengan la obligación de cuidar o tengan legalmente a su cargo a la víctima.