Tras la muerte de tres menores que fueron atacados por perros de la raza pitbull en el lapso de un mes en el estado, la Dirección de Salud Pública reportó ayer el abandono de cuando menos 15 canes por semana que han tenido que ser sacrificados por el área de Control y Bienestar Animal.
El doctor Bernardo Dávila, titular de esa dependencia municipal, indicó que por sus tendencias agresivas, todos esos perros son sacrificados sin opción de ser adoptados.
“Antes de que se dieran los ataques a menores se recibían de dos a cuatro perros pitbull cada dos semanas, pero el número se disparó considerablemente cuando uno mató a mordidas a un niño en Monclova”, afirmó el doctor.
Agregó que en seis días 20 perros pitbull pura o cruza fueron entregados por sus dueños al Centro de Control y Bienestar Animal de Saltillo y fueron sacrificados con la administración de somníferos, que les provoca un paro cardiaco y les evitan el sufrimiento.
Por su parte, el doctor Juan Salas, responsable de Control Canino de la dependencia, informó que en Saltillo existen cerca de 15 mil perros de raza pitbull que tienen dueño.
Anunció que se realizará el registro de cada perro y su propietario para tener un control y vigilar que la mascota no se vuelva agresiva.
Salas indicó que es imposible cambiar el carácter de los perros pitbull o de cualquier otra raza agresiva que llegan al centro, pues no se cuenta con un entrenador para esa tarea.
OPB