Paralaje

Nuevo fiscal

Por Hugo Díaz Aguilera

Tal vez para la hora en que usted este leyendo esto los coahuilenses contamos ya en la titularidad de la Fiscalía General del Estado con un nuevo funcionario. Federico Fernández Montañez a partir de hoy si otra cosa no sucede, será el nuevo Fiscal en la entidad con una tarea a nuestro juicio muy importante.

Escuché atento la ponencia presentada por quien se desempeñó con buenos resultados en la Secretaría de Seguridad Pública del Estado, no por nada nuestra entidad sigue siendo ejemplo a nivel nacional en varios rubros pero particularmente en el tema de seguridad.

Con Piedras Negras, Saltillo y Torreón, hoy Coahuila demuestra que si se desea se pueden hacer buenas cosas en renglón tan vilipendiado en la sociedad mexicana. La ponencia con la que Federico logró conquistar a la Comisión de Gobernación, Puntos Constitucionales y Justicia del Congreso del Estado tiene su base en cinco ejes coyunturales, a decir, Trato digno al ciudadano, Continuidad a carpetas de investigación, Inteligencia, Capacitación, Investigación, identidad y pertinencia.

Posiblemente quien esto escribe, y por el poco conocimiento en la materia no percibe entre el plan de trabajo de Fernández Montañez algo a lo que se le necesita imprimir el acelerador, la proximidad con la ciudadanía.

Para nadie de los que esto leen le resulta difícil escuchar un comentario agrio contra las corporaciones policiacas estatales, tampoco sugiero que esto sea verdad, si no no tuviéramos el índice de seguridad con el que contamos.

Sin embargo, Federico no puede alejarse de una de las propuestas centrales del gobernador Manolo Jiménez en el tenor de que la ciudadanía tenga confianza en sus policías.

Hace unos días aquí en la región trascendió en redes el reporte de un posible levanton y/o desaparición de una joven por parte de una corporación policial, palabras más palabras menos acusaban en la publicación familiares y amistades de la joven en referencia. Horas más tarde se supo que la joven había sido detenida junto a otra persona del sexo masculino porque trataba de comercializar varias dosis de la droga conocida como cristal que traía en su poder.

Dicho de otra manera, en el colectivo social hay la sensación de que a través de redes sociales se les puede “incomodar” a las corporaciones policiacas, y tal vez resulta chicle y pega, diríamos en el barrio. Lo anterior ocurre en buena medida por la fama que se han ganado los cuerpos policiacos.

Somos testigos que en las últimas tres administraciones de Coahuila se ha hecho un esfuerzo extraordinario para depurar de malos policías a las corporaciones para ser más efectivos y se han obtenido resultados buenos. 

La mejora continua de que cualquier proceso aun y cuando no esté mal y ofrezca buenos resultados puede mejorarse es permanente. Federico tiene en sus manos una tarea de relevante importancia para lograr abatir el rezago en las carpetas de investigación con inteligencia y eficacia, capacitando a las policías y funcionarios que sientan un compromiso profundo con sus corporaciones dando un trato digno a los ciudadanos, pero al mismo tiempo logrando un acercamiento que le haga recobrar la confianza al grado que cuando vean una patrulla policiaca las familias coahuilenses se sepan protegidos y respaldados en su integridad. El apoyo del gobernador seguro lo va a tener ¡Éxito, Federico!