Firma y Señal

A Eleazar Bazúa Flores no hay que perderlo de vista. Hubo un ajuste en el organigrama de la Secretaría de Gobernación, donde manda el hidalguense Miguel Osorio Chong, pero quizá sea cuestión de unas semanas para que regrese a Coahuila el funcionario federal.

Bazúa no salió por la puerta trasera. No dejó la delegación de SEGOB por cuestiones irregulares o asuntos que puedan generarle cuestionamientos y críticas. Más bien, dicen los que saben del repentino cambio en esta oficina, que fue por otros temas internos.

Disciplinado e institucional, Bazúa es bien visto por los que toman las decisiones en el Palacio Rosa. Por eso, no le extrañe que en unos días vuelva al puesto e incluso, a desempeñar alguna otra asignación en esta entidad donde ha estado trabajado desde mayo del 2013, cuando fue designado como delegado.

Pero si de servidores públicos hablamos, tampoco dejó cuentas mochas el ex delegado de SEDESOL Emilio Mendoza Kaplan.

Desde octubre o noviembre, Mendoza –quien por cierto es familiar directo del ex gobernador Eliseo Mendoza –había comentado que pretendía hacer carrera política en su natal Oaxaca. Que ya no quería seguir aquí.

Hay que recordar que Mendoza fue diputado federal por el municipio de Juchitán de Zaragoza en Oaxaca y ocupó además, cargos importantes en la administración estatal de aquella entidad antes de llegar a Coahuila, como delegado de SEDESOL.

Habrá Firmas y Señales con la designación del nuevo titular de la oficina de SEDESOL. Una codiciada silla que muchos quieren usar… pero como catapulta política… ¿o no?