Dobleces

Loretta tambalea
La ministra Loretta Ortiz Ahlf está más cercana a los círculos neoliberales que a los del pueblo. Su enredo con instituciones financieras y sus conflictos de interés, investigados por Estados Unidos, le restan autoridad moral frente a Morena y los electores. Su candidatura tiene riesgo de ser castigada en las urnas. Hace unos días, la Security and Exchange Commission (SEC por sus siglas en inglés) recibió una petición de uno de los despachos de abogados más influyentes de Estados Unidos, Quinn Emmanuel, para que informen el avance de la denuncia contra la ministra afín a la cuatroté y su yerno Abel Chávez Salinas interpuesta por las hermanas Garza por posible tráfico de influencias o hechos de corrupción en su litigio en la Corte contra Santander. En el caso de Santander, donde, tras una condena previa por más de mil millones de dólares, la ministra Ortiz votó por admitir una revisión a favor del banco. El sospechosismo es que en este asunto, Abel Chávez Salinas fue fichado por el equipo legal de Santander —encabezado por Javier Quijano y Víctor Oléa— para patrocinar los intereses del banco ante la Suprema Corte, lo que coincidió con el intento de Loretta Ortiz por reabrir un caso que ya había sido desechado en dos ocasiones. La contratación del yerno de la ministra ha sido señalada como una posible razón del cambio de postura en la Corte, lo que ha levantado acusaciones de tráfico de influencias. A esto se suma el caso de Actinver, el grupo financiero, presidido por Héctor Madero, el 14 de diciembre de 2022 fue condenado al pago de mil cien millones de pesos, con un interés anual del 6%. El demandante en este caso Rafael Zaga Tawil. A la fecha, la pena ascendería a mil quinientos millones de pesos. La sanción fue impuesta debido a que, presuntamente, el banco violó la normatividad de la industria bancaria y fiduciaria en México en perjuicio de su cliente. En este asunto Actinver exhibe cómo el entorno de la ministra Loretta Ortiz, en particular su yerno Abel Chávez Salinas, habría intervenido para favorecer a Rafael Zaga Tawil, acusado de lavado de dinero y del desfalco al Infonavit por más de 5 mil millones de pesos. Loretta anunció en privado su voto a favor de Zaga, buscando condenar a Actinver pese a que el banco solo pidió suspender los poderes fiduciarios de Zaga. En todo esto, la investigación de la SEC se lleva a cabo en el contexto de la elección judicial que comenzaron el pasado 30 de marzo, en medio de señalamientos de que el propio Jordi Oropeza, por la vía de Chávez Salinas, busca conseguir recursos para la campaña de Loretta Ortiz. La ministra Loretta Ortiz Ahlf estresa el proceso electoral y empaña su cercanía con la cuatroté. Estados Unidos tiene en la mira los movimientos políticos del país y un escándalo de este tamaño sobre una ministra de la Corte no es un tema menor. Hay una posible colusión. Y sus aspiraciones de ser electa y llegar a presidir la Corte se reblandecen, la dejan sin fuerza y se tambalea