Dobleces

Los enemigos de Aldana

Israel Mendoza Pérez

@imendozape

El reelecto dirigente del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana, Ricardo Aldana Prieto, tiene un enemigo declarado al interior de la cuatroté: el Partido del Trabajo. La fuerza política hermanada a Morena, creada por el dirigente histórico, Alberto Anaya, ve en el líder petrolero “un sindicalismo corporativo”.

El diputado Reginaldo Sandoval, coordinador del Grupo Parlamentario del PT, se encargó, en meses pasados, de darle voz a la disidencia del STPRM y tomó la ruta en sentido contrario a los tiempos políticos de la cuatroté.

En su calidad de mandamás de la bancada petista, Reginaldo Sandoval advirtió: “Nosotros estamos en la ruta de la construcción de un sindicalismo diferente de la 4T por todo lo que ha venido ocurriendo en el país”. Desde ahí rompió avalar al expriista y simuló una resistencia las decisiones del partido en el poder.

Sin embargo, el petista le mintió al dirigente disidente Juan Martín Morales Barrera, integrante del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) y líder de la planilla “Fuerza Oro Negro”, al ofrecerle apoyo a su candidatura para dirigir el sindicato petrolero y echar a Aldana Prieto, ya que el Partido del Trabajo solo es un membrete y carece de sectores como el obrero para ser la fuerza política defensora de la clase trabajadora. Sus principales líderes tampoco provienen de la lucha sindical.

El diputado Reginaldo aprovechó a la disidencia petrolera para golpetear a Ricardo Aldana y puso en duda que el gobierno aplicara la ley en materia de libertad sindical. Desde el Congreso se convirtió en un dique para el dirigente petrolero y soltó: “la ley establece que no puede ser llamado un sindicato a elegir su nueva mesa directiva si no hay una adecuación estatutaria completa”.

Ahora, tras rendir protesta para el periodo 2025-2030, Ricardo Aldana ratificó su compromiso con la cuatroté, y la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, atestiguó ese momento. Esa era la señal clara de que los petroleros están con la cuatroté. Sin embargo, el PT es enemigo abierto de Ricardo Aldana.

Lo que hizo Reginaldo Sandoval fue promover liderazgos alternos para expulsar a Ricardo Aldana y exhibir el pasado ominosos que significa un personaje torvo como el dirigente sindical. El movimiento del diputado para declararse opositor a Aldana Prieto tiene dos escenarios. El primero es desconocimiento de la ruta trazada por Morena de institucionalizar al sindicato petrolero, ya que Aldana Prieto se alineó al partido en el poder y sepultó su pasado priista.

El segundo es la ideología falsaria aunque redituable en la que ofrece más de lo que puede dar en realidad. El PT en calidad de partido aliado al poder encontró un espacio de negociaciones y acercamientos a personajes de mayor jerarquía. Esa estrategia se maneja en el lobbying del PT.

La realidad es que los jefes del PT tienen al partido a disposición de disidentes y aspiracionistas al poder. Es la escuela de Alberto Anaya de pedir y obtener beneficios redituables. Pero en esta ocasión Ricardo Aldana desde hace más de dos años ya tenía el aval del partido en el poder.