Convicciones

Toni Erdmann, llega de manera inesperada
Rubén Aguilar Valenzuela
La película Toni Erdmann (Alemania – Austria, 2016) está dirigida por Maren Ade, de quien también es el guion. En la historia que se nos cuenta Ines Conradi (Sandra Hüller) trabaja en una empresa alemana de negocios establecida en Bucarest, capital de Rumania.
Su vida parece estar muy bien organizada hasta que parece su padre, Winfried Conradi, (Peter Simonischek), que trata de hacerle ver la vida, la sociedad y el trabajo de una manera distinta a como ella ahora lo está haciendo.
Winfried es un profesor de música divorciado y al que le gusta hacer bromas extravagantes que involucran a personajes que él construye y actúa.
A la muerte de su perro decide reencontrarse con su hija, a la que no ve desde hace tiempo, y viaja a Bucarest. Inés está de tiempo completo inmersa en un proyecto petrolero que requiere grandes inversiones y puede ser un extraordinario negocio.
No tiene tiempo para sí, para disfrutar de las cosas aparentemente triviales y de la cotidianidad de la vida de todos los días. De encontrarse y salir con amigas y amigos. Solo vive para tener éxito en el trabajo.
Winfried, ya en Bucarest, espera a Inés en el vestíbulo de la oficina donde trabaja, que tiempo después aparece acompañada por altos funcionarios de la empresa, que van a una importante reunión.
Winfried se pone gafas de sol y dientes postizos como disfraz cómico, y se acerca al grupo escondido detrás de un periódico. Inés lo ignora, pero después, al terminar su jornada de trabajo, se reúne con él y lo invita a una recepción en la embajada de Estados Unidos.
Por la noche, en la recepción, se encuentran con Henneberg, CEO de una compañía petrolera alemana con quien Inés desea obtener un contrato de consultoría. Ella intenta llamar la atención de este, pero se interesa mucho más en lo que platica su padre.
Winfried le dice a Henneberg que ha contratado a una hija de reemplazo porque Inés siempre está ocupada. Para sorpresa de esta, Henneberg los invita a tomar algo junto con sus amigos y compañeros de trabajo.
Después de varios días con las locuras inesperadas de Winfried, padre e hija intentan llevarse bien. Inés agotada por el trabajo se queda dormida, y deja de ir a una reunión clave con sus clientes, y culpa a su padre por no despertarla.
Winfried se siente rechazado y se va de Bucarest. Inés asume que su padre se ha ido y continúa con su vida de siempre. Ella está en un bar con dos amigas cuando de pronto aparece un hombre, que se presenta como Toni Erdmann, con peluca y dientes postizos. Inés sabe que es su padre.
Sus amigas entablan conversación con este hombre, que se presenta como un consultor que visita Bucarest para asistir al funeral de la tortuga de su amigo y para atenderse con un dentista.
Inés está cada vez más frustrada e insatisfecha en su vida laboral y personal. Su padre, como Toni Erdmann, se hace presente fuera de la oficina y en reuniones.
Su primera reacción es acusar a su padre de querer “arruinarla” y hacerla fracasar en su carrera profesional, que tanto le ha costado.
En la medida que pasa el tiempo se da cuenta, que su padre la quiere ayudar, pretende que vea una vida distinta en la que ahora está inmersa. Salen juntos a distintos sitios y en el rencuentro con su padre ha iniciado un cambio.
Inés cita a sus compañeros de trabajo en su departamento, para celebrar su cumpleaños. No puede cerrar su vestido que es muy apretado. El timbre suena y decide recibir a los invitados desnuda.
A estos les dice que su cumpleaños es una “fiesta nudista” y deben desnudarse si quieren asistir. Unos aceptan y otros no. En medio de la reunión aparece Winfried vestido con un disfraz que lo cubre todo.
Al principio los asistentes se asustan, pero luego les divierte la vestimenta y Winfried pronto se va de la reunión e Inés lo sigue y en el parque público donde lo alcanza, se abrazan.
El papá de Inés regresa a Alemania y poco después muere la abuela y ella va al entierro. En el jardín de la casa habla con Winfried y le saca los dientes falsos del bolsillo de su camisa y se los pone.
Al regresar a Bucarest renuncia a su trabajo y se va a Singapur donde tenía ganas de estar, para comenzar una nueva vida. Su padre la ha hecho pensar y cuestionar su forma de vida.
Es una película original y distinta, muy inteligente, que aborda el tema de la relación entre padre e hija de una forma creativa y fuera de toda convención.
La crítica profesional reconoce que se trata de una gran película, algunos dicen que es una obra maestra. Maren Ade esquiva los lugares comunes, las situaciones trilladas, los giros previsibles.
De ella comenta: “Hacía tiempo que quería hablar de la familia, del papel que juega cada uno de sus miembros y de cosas que se repiten una y otra vez. De un lado, sentimos el profundo deseo de romper con la familia, de volver a empezar de cero. Así, en la película, está el padre, que es muy bromista y que llega a adoptar otra personalidad, la de Toni; esto me ha permitido contar esos relatos familiares de manera diferente”.
La película en 2016 fue seleccionada para competir por la Palma de Oro en el Festival de Cannes y seleccionada como la candidata de Alemania a mejor película extranjera en los Premios Oscar. En los Premios del Cine Europeo ganó como: mejor película, mejor director, mejor guionista, mejor actor y mejor actriz. En el festival del Cine Alemán obtuvo seis premios.
Toni Erdmann
Título original: Toni Erdmann
Producción: Alemania – Austria, 2016
Dirección: Maren Ade
Guion: Maren Ade
Fotografía: Patrick Orth
Música: Patrick Veigel
Con: Lucy Russell; Michael Wittenborn; Thomas Loibl; Trystan Pütter; Hadewych Minis; Ingrid Bisu; Vlad Ivanov; Victoria Cocias (…)
@RubenAguilar