Convicciones

África mía
Rubén Aguilar Valenzuela
En 1985, cuando se estrenó África mía (Estados Unidos, 1985) dirigida por Sydney Pollack, ganó siete Premios Oscar: Mejor película; Mejor director; Mejor guion adaptado; Mejor fotografía; Mejor banda sonora; Mejor dirección de artes y Mejor edición de sonido.
El guion se basa en el libro de carácter autobiográfico Memorias de África de la escritora danesa Karen Blixen (Rungsted, 17 de abril de 1885-Rungsted, 7 de septiembre de 1962) publicado en 1937. La historia cuenta que a principios del siglo XX Blixen (Meryl Streep) decide casarse con un primo lejano, el barón Bror Blixen-Finecke (Klaus Maria Brandauer) e irse a vivir a Kenia, entonces una de colonia del Imperio británico.
Los dos deciden poner en operación una finca dedicada a la producción y el procesamiento del café, la The Karen Coffee Company. Este matrimonio de conveniencia seis años después se rompe, debido al carácter mujeriego de este y a que en los hechos no hay amor entre la pareja. Él la contagia de sífilis que había contraído antes de casarse.
Ella se queda con la finca y en la medida que pasa el tiempo disfruta de su trabajo y de su estancia en África. Establece una buena relación con los pobladores del grupo originario que trabajan con ella. Les facilita que ellos y sus hijos vayan a la escuela.
En ese tiempo conoce a un cazador británico, Denys Finch Hatton (Robert Redford), con quien establece una relación amorosa. Esta no es fácil, él no concibe la vida sin su independencia y ella precisa de un compañero permanente y comprometido.
Un incendio destruye la plantación al mismo tiempo que los precios del café caen. Karen se arruina y vende la finca. En 1931, antes de regresar a la casa familiar en Dinamarca, Denys tiene un accidente en su avioneta y muere. Lo entierran en las colinas de Ngong.
Blixen siempre quiso regresar a África, pero ya nunca volvió. Su nostalgia por la tierra africana se refleja en una carta a una vecina de su antigua propiedad: “Saluda de mi parte a todos los que aún se acuerden de mí, también al paisaje que tienes alrededor, al bosque detrás de la casa donde vivían los N`derobo, y a los viejos árboles retorcidos y llenos de flores blancas de la sabana. También, si vieras a alguno de aquellos animales que en mis años aún podíamos encontrar allá arriba, y que siempre he pensado que eran los auténticos dueños de aquellas tierras”.
La historia que se narra en la película está muy bien construida por Pollock. La fotografía de David Watkin es muy buena y también lo son las actuaciones de Meryl Streep y Robert Redford. Además de los Oscar, la película ganó los Premio BAFTA de 1985 como Mejor película, Mejor guion adaptado; Mejor fotografía, Mejor banda sonora y Mejor actor de reparto para Klaus Maria Brandauer. Y se hizo de otros muchos premios.
En 1986 vi por primera vez la película, y la he vuelto a ver estos días, después del regreso de un viaje por África, donde estuvimos en la finca y en la casa donde vivió Karen Blixen, hoy un museo cerca de Nairobi, Kenya. La película no ha envejecido y sigue siendo una historia muy bien contada y con magníficas actuaciones.
@RubenAguilar