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Jueves 26 de Diciembre 2024
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POR LÁZARO GONZÁLEZ
Este jueves, el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, enlistó nuevamente los objetivos de la Cámara para reducir los gastos en al menos mil 500 millones de pesos. Pero también adelantó la intención de bajar en un 50 por ciento las llamadas subvenciones, es decir, los recursos que reciben las bancadas directamente y que no están obligados a transparentar.
¿Pero de cuánto estamos hablando…?
De acuerdo con cifras oficiales de la Cámara de Senadores, la legislatura que concluyó, la 63, recibió en subvenciones tres mil 89 millones de pesos durante sus tres años de funciones (de septiembre de 2015 a julio de 2018).
Por partido el partido fue el siguiente:
De acuerdo con los documentos, citados por el portal ¿Quién Compró?, el mes que recibieron más dinero las bancadas fue apenas en julio pasado, cuando los senadores salientes, previo al término de sus funciones, se repartieron así:
Según Ricardo Monreal, de no llegar a un acuerdo con las actuales bancadas del Senado, Morena utilizará su mayoría para avanzar en el tema.
Además dijo:
“Vamos a transparentar las subvenciones, lo que recibamos, donde se gaste. No tenemos ningún problema, no debería haber ningún problema porque cada grupo parlamentario aclare sus subvenciones. Lo que sea”
¿Por qué la necesidad de transparentar?
Actualmente, los senadores, al igual que los diputados, no están obligados a transparentar el uso de las subvenciones. Sólo presentan informes de cifras totales de lo que reciben y de lo que gastan, pero no dicen en qué, ni están sujetos a entregar comprobantes de gasto o facturas.
En el mejor de los casos, se ha conocido el destino de los recursos por explicaciones espontáneas de los propios partidos. En 2015, por ejemplo, el Partido Verde admitió que usó los recursos que recibió por este concepto de subvenciones en el Senado y en la Cámara de Diputados, para la difusión de sus polémicos spots en el cine, durante el proceso electoral de hace dos años.
Hasta ahora no se tiene conocimiento de un reporte pormenorizado del gasto de las subvenciones por parte de los partidos.
De acuerdo con la Ley Orgánica del Congreso, artículo 74, el coordinador ejerce todas “las prerrogativas y derechos que este ordenamiento otorga a los grupos parlamentarios”.
¿Y las auditorías?
Históricamente, ni la propia Auditoría Superior de la Federación ha podido comprobar que el gasto del dinero que reciben los partidos en el Senado a través de las llamadas subvenciones se ejerce con transparencia.
Según la Auditoría, la falta de claridad ha sido particularmente en la partida 39903 Asignaciones a los Grupos Parlamentarios, pues no se proporciona la documentación que sustenta la aplicación de dichos recursos.
El máximo órgano fiscalizador del país concluyó, en sus auditorias de 2012, 2013, 2014, 2015 y 2016, que no se cuenta con la información necesaria que permita evaluar la razonabilidad del gasto, o bien, comprobar que los recursos se ejercieron para llevar a cabo los trabajos legislativos.
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