Piedras Negras /13 junio 2018
Por: Mariela Pulgarín
La actual temporada de calor y la tensión de fin de año son factores que inciden en el incremento de la violencia dentro del seno familiar hasta un 40 por ciento que deriva en divorcios y adolescentes con problemas de comportamiento.
La encargada del Centro de Atención Familiar a la Violencia (CEFAME), Mariela Ruvalcaba, indicó que tan solo la semana pasada, el centro se saturó de personas que buscaban atención y aunque se les sugirió establecer citas, decidían esperar horas para ser atendidas pues estaban muy desesperados.
CEFAME tiene lleno las citas para esta semana y personas en espera de que se les programe una atención, ya que las consultas deben ser periódicas, para que haya avance en los solicitantes.
Como las terapias son de 45 minutos, se deben agendar para evitar que las personas se queden sin ser atendidas por que no hay cupo para terapias.
Ruvalcaba mencionó que hay personas en espera de que se les programe una atención dado que las consultas deben ser periódicas; esto con la finalidad de que haya avance en cada caso pero el servicio suele saturarse esta temporada.
Muchas de esta personas también acuden al DIF Municipal, cuyos servicios están al límite y les programan las terapias con espacio de un mes, según señalaron algunas de las asistentes al centro, que también ido al DIF.
La directora del CEFAME aseguró que es la temporada de alta afluencia y que en vacaciones suele disminuir, pero no deja de presentarse la violencia familiar, depresión y autolesiones.
El rango de edades de quienes acuden a este centro, aseguró, son variadas y de sexo indistinto; en una semana pueden atender a un niño de 13 años con problemas de autolesiones, así como una mujer de 24 años que es madre de familia con intentos suicida, hasta adultos (hombres y mujeres) de 30 a 50 años con situaciones de violencia física y psicológica por parte de sus parejas.
La difusión de instituciones que ayudan a combatir la violencia familiar es cada vez mayor, por lo que las víctimas buscan atención y orientación en los diferentes centros en donde presentan casos de depresión hasta violencia extrema.
“La gente identifica cuando vive una situación de violencia y es más abierta a manifestarlo”, agregó y dijo que en el caso de menores con problemas de conducta son diversos factores pero siempre con raíces en el entorno familiar.
En lo que va del año, se han detectado siete casos de potenciales suicidas que están saliendo adelante: se trata de jóvenes entre los 20 y 30 años y uno de la tercera edad que sufría abandono.