La Secretaría de Trabajo y Conflictos del Sindicato Único de Trabajadores y Empleados al Servicio del Municipio de Saltillo, Gabriela Córdova González, exigió ayer al alcalde Isidro López Villarreal acciones inmediatas para proteger la vida de los trabajadores del ayuntamiento, principalmente a los de las áreas operativas.
La funcionaria condenó la falta de prudencia y de tacto del edil, quien anunció que “los trabajadores deberán tener más cuidado” pues no implementará mayores medidas de seguridad a pesar del trágico accidente vial que costó la vida de un trabajador municipal y dejó gravemente herido a otro el pasado 20 de julio en el bulevar Moctezuma.
Córdova González agregó que parece no haber manera de hacerle ver a López Villarreal la urgente necesidad de dar más seguridad a los empleados del municipio, no nada más los sindicalizados, y criticó la apatía de los colaboradores más cercanos del edil encabezados por la secretaria técnica Esther Quintana Salinas.
Señaló que mientras el Presidente Municipal se niega a proteger a los empleados del municipio, asigna patrullas a empresas externas como City Lum, que le prestan servicios de muy dudosa calidad a cambio de grandes sumas de dinero que la autoridad local no repara en pagar.
La entrevistada comentó que el sindicato ha insistido reiteradamente al alcalde sobre la necesidad de proveer a los trabajadores de uniformes, que son vitales sobre todo en las áreas operativas, pero ha hecho caso omiso.
Conductora sí estaba ebria La funcionaria sindical desmintió asimismo versiones en el sentido de que Alejandra Valdés Ávalos, de 27 años, quien el pasado 20 de julio arrolló trágicamente a dos trabajadores del ayuntamiento, no estaba alcoholizada en el momento del accidente.
“Sí estaba ebria, yo hablé con la joven en la patrulla en la que estaba con su acompañante, un primo de ella que también estaba alcoholizado, aunque en menor grado”.
Córdova González dijo que las víctimas no tuvieron ninguna oportunidad de evitar el impacto y que incluso observó que se trató de “colocar” al acompañante del accidente al volante en el momento del impacto, pues un zapato de la joven estaba aún “pegado” al pedal acelerador.
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