El Instituto Municipal del Transporte en Saltillo aplicó más de 7 mil 500 multas a choferes que pusieron en peligro a los usuarios al pasarse rojos, ir en celular o bien por pelear pasaje, aunque ninguno fue sancionado de manera personal, reveló ayer el titular de la dependencia, Gilberto Navarro Chapa.
El funcionario reconoció que es imposible tener control sobre la capacitación de los conductores, porque hay una alta rotación.
“Nosotros como autoridad seguimos con el programa de capacitación, el tema es que los choferes no toman el trabajo como cosa seria, sino como provisional y por eso no hay compromiso”, dijo.
Indicó que entre trabajadores de taxis y de transporte urbano, donde a veces hay hasta dos o tres por unidad, suman más de 13 mil choferes, por lo que resulta muy complicado capacitarlos a todos.
El director del transporte refirió que el ayuntamiento de Saltillo ha capacitado a través del instituto a poco más de 2 mil choferes, muchos de los cuales no son seguros, pues si encuentran otro trabajo más formal y con mejor paga, se van.
Según el funcionario, para “pasar” la capacitación los conductores necesitan tomar cinco módulos y la mayoría solo tiene la inducción.
Según Navarro Chapa, el proceso es tortuoso para muchos y ahí el instituto no puede actuar porque se vuelve un círculo vicioso la contratación.
“Es un problema de actitud muy serio. Ellos ni siquiera tienen la actitud de cambiar y en ocasiones generan violencia contra los usuarios porque los maltratan. Nosotros hemos recibido reportes por mal servicio, porque no respetan, pero a la gente le falta ir más allá y presentar una denuncia más formal”, subrayó.
Según Navarro Chapa la decisión de despedirlos también tiene mucho que ver por parte de los concesionarios, pues lo que ellos quieren es ganar más aunque “se lleven de encuentro” a los usuarios.
“Son muchas quejas diarias, pero en ocasiones son por redes sociales, lo que nos impide actuar, pero si no recibimos un trato adecuado hay que hacerlo”, manifestó.
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