Los diputados de la LX Legislatura en Coahuila no tendrán de qué preocuparse durante las fiestas decembrinas ni porque estarán “desempleados” a partir del 1 enero del año entrante.
Y es que, antes de finalizar su tarea, el próximo 31 de diciembre, cada uno de los legisladores estatales recibirá 40 días de su sueldo en aguinaldo, lo que representa en promedio 100 mil pesos, a lo que se suma un ahorro de tres años que se duplica para alcanzar un monto de 540 mil pesos, más su sueldo del mes, es decir, 90 mil pesos, lo que hará que obtengan, en promedio, 730 mil de pesos cuando se despidan de su trabajo legislativo.
Pero eso no es todo, el presidente de la Junta de Gobierno del Congreso estatal, José María Fraustro Siller, reveló que las fracciones parlamentarias –incluidos el Partido Acción Nacional, Unión Democrática de Coahuila, Partido Verde Ecologista de México, Nueva Alianza y el Partido Primero Coahuila– analizan la posibilidad de autorizarse un “bono de productividad”, acuerdo que dependerá del dinero que haya en las arcas del Poder Legislativo.
“El bono de productividad lo estaríamos analizando, pero quiero decirles que lo otro es un fondo de ahorro al que aportamos entre cinco y 10 por ciento de nuestro salario durante los tres años de la Legislatura”.
El legislador tricolor comentó que este monto se obtiene, pues por cada peso que aportaban los diputados, el Congreso del estado aportó una cantidad igual. “Entonces es un capital de retiro, como un guardadito”, detalló el coordinador del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Además, manifestó que por el momento no es tiempo de hablar sobre un bono de productividad, pero adelantó que la discusión podría darse durante diciembre, tras el cierre del ejercicio 2017.
“En diciembre vemos cómo cerramos el año y si existen recursos lo vemos, pero ahorita no lo hemos considerado ni lo tenemos en la agenda de discusión”.
Fraustro Siller justificó la acción, al señalar que los actuales diputados no son los primeros en otorgarse el bono de salida.
Además, comentó que su autorización depende de al aprobación de todos los partidos con representación en el Congreso del estado, es decir, todas las fuerzas políticas tienen que estar de acuerdo para “premiarse” con un bono de productividad, al cierre de las actividades legislativas en la entidad.
En los tres años de Legislatura, sólo por concepto de salario ordinario, cada diputado recibió en promedio 3 millones 240 mil pesos.