Saltillo, Coahuila / 27 de Marzo de 2019
Por: Alberto Gómez
Habían transcurrido 90 minutos de su arribo a la ex Hacienda Plan de Guadalupe -en donde se conmemoró el 106 aniversario de la promulgación de este documento-, junto al secretario de Gobierno de Coahuila, José María Fraustro Siller, se disponía a abordar su camioneta para retirarse del lugar, cuando de pronto, un grupo de campesinos lo interceptó.
“Qué vamos a comer, de qué vamos a vivir”, le cuestionó el líder de la agrupación Dorados de Villa, Armando Mata Valdez, que junto a una decena de campesinos, exigieron al subsecretario de Gobernación, Zoé Robledo Aburto, le dijera al presidente López Obrador que les urgía apoyo para el campo.
No, la visita no había sido del todo grata, pues los molestos ejidatarios increparon al funcionario federal quien evidenciaba fastidio, su rictus así lo dejaba entrever.
“Ya estamos en abril, cuándo vamos a comprar las vacas”, prosiguió Mata Valdez con su protesta al funcionario federal quien solo atinó a decir “pásenme sus datos para hablar con el delegado”.
Hombres y mujeres de diversos ejidos de la entidad, exigían se les incluyera en los programas federales, el funcionario parecía desconcertado, no sabía qué decir.
“Nosotros no tenemos Crédito a la palabra, estamos bien jodidos”, afirmó el campesino quien insistió, “que siga buscando policías -por la convocatoria a la Guardia Nacional-, pero nosotros lo que queremos son vacas y chivas, ¿qué vamos a comer?”.
Como si estuviera en shock y sin la compañía de ningún colaborador, Robledo Aburto repitió: Déjeme sus datos, alguien lo tiene que atender.
“Pero no hay nada para nosotros”, reviró el quejoso, a lo que el subsecretario cuestionó si ya se había acercado a conocer cómo están los proyectos de Crédito a la Palabra -un programa de estímulos económicos lanzado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, que hasta el momento, sólo ha beneficiado a la región Sureste del país.
Ya un poco molesto ante la nula respuesta favorable por parte del funcionario, el líder campesino ironizó: Nosotros no somos del sur, no podemos cambiar Coahuila allá para Chiapas.
“Pero hay programas también para el norte”, insistió Robledo Aburto.
Los Dorados de Villa son una agrupación integrada por agricultores, ixtleros, candelilleros, ganaderos y similares de alrededor de 260 ejidos de la entidad.
“Nosotros necesitamos ganado: cabras, borregos y vacas”, reiteró Mata Valdez.
Bajo el compromiso de que atendería el problema y lo hablaría con el delegado federal en Coahuila, Reyes Flores Hurtado, -quien no asistió al evento-, Mata Valdez estrechó la mano del Subsecretario de Gobernación y lo dejó partir luego de una “acalorada” conversación que duró poco menos de dos minutos.
Piden inclusión
Otro de los integrantes del movimiento que se identificó como Pedro, exigió que se incluya a la gente de Coahuila en el programa Crédito a la Palabra.
“Queremos que nos incluyan, porque nomás a la gente del Sur, la gente del Presidente, nosotros también tenemos hambre, tenemos familias y necesitamos apoyos”, manifestó.
Cuestionó la razón por la cual no se han brindado estos estímulos en el estado y sólo se haya destinado el recurso para las entidades del sur, dijo, “si nosotros también somos hijos de México”.
“Queremos que nos reparta también el queso; por qué en la campaña el presidente habló del crédito a la palabra y ahora nos dejó fuera”, puntualizó.
Insistió que como campesinos, también tienen necesidad y requieren el apoyo del gobierno federal y aunque reconoció que los estados del Sur tienen más carencias, reiteró la urgencia de fortalecer la ganadería en Coahuila al recordar que en los ejidos, una gran cantidad de gente vive del ganado.