Saltillo, Coahuila / 23 Marzo 2018
Por: David González
Como parte de su preparación académica los alumnos que estudiaban medicina tenían que (atrapar o pedir) alrededor de 30 perros o gatos en alguno de los semestres para practicarles algunas intervenciones quirúrgicas. Todos eran mutilados en una o más ocasiones y algunos quedaban muertos en la plancha.
Dicha práctica está prohibida desde hace más de seis años aclaró el Director de la Facultad de Medicina Unidad Saltillo de la Universidad Autónoma de Coahuila Francisco Durán Íñiguez.
Señaló que ahora sólo usan animales pequeños, que sí están permitidos, como ratas y conejos; además de un sistema de alta tecnología de simulación para operaciones.
Como se recordará el pasado miércoles, asociaciones protectoras de animales en la Laguna, denunciaron el caso de una estudiante de la Faculta de Medicina de Torreón de la UA de C que adoptó un perro que terminó en la plancha de operaciones luego de someterlo a prácticas quirúrgicas como parte de su formación académica.
Desde Torreón la activista defensora de animales Elizabeth Sánchez dijo que no se vale que a estas alturas estudiantes sin escrúpulos usen a los animales para practicar experimentos de laboratorio.
“Aquí desde el 2012 la situación cambió con la legislación para el cuidado de los animalitos, ya que empezamos a quitar las prácticas quirúrgicas con animales”, contó el directivo de la Facultad de Medicina Saltillo.
“Como forma de experimentación queda terminantemente prohibido y no lo estamos haciendo”, reiteró el galeno al tiempo de explicar que además usan un simulador virtual con modelos de maniquís, para realizar las prácticas quirúrgicas.
Recordó que regularmente hace algunos años se abrían perros para retirarles el vaso o hacer algún corte de intestinos como parte de las prácticas en la escuela de medicina.
Señaló que muchos perros salían bien de las cirugías y eran incluso adoptados por los alumnos, mientras que otros no sobrevivían.
Agregó que desde ese entonces se tuvo el llamado de las asociaciones protectoras de animales quienes catalogaron estas intervenciones como maltrato animal y quedó prohibido.