Saltillo, Coahuila / 31 de Enero 2020
Por: David González
Al señalar que hay más de 180 mil coahuilenses con discapacidad auditiva que sufren de discriminación laboral, social y familiar, el diputado Marcelo Torres Cofiño explicó que se hizo un exhorto desde el Congreso a que se brinde más inclusión a este sector de la población.
El legislador panista aseguró que esta petición que se llevó al pleno este miércoles, se derivó de una serie de reuniones con grupos de personas con este tipo de discapacidad, en su mayoría de jóvenes, que ven esto como una problemática ya que la discriminación es una violación a sus derechos humanos.
Como ejemplo mencionó el maltrato generalizado y discriminación por parte de instituciones educativas -públicas o privadas- que no les permiten a los alumnos con esta condición que asistan a clases con intérpretes.
“Hay instituciones que consideran que los intérpretes o los acompañantes son alumnos y deben pagar colegiatura o la educación, se debe apoyar a estos grupos que no son menos coahuilenses que otros”, apuntó.
Torres Cofiño añadió que en cuestión laboral, a quienes esta problemática, se les hacen ofrecimientos con sueldos más bajos que otra persona o en comparación a trabajadores que presentan otra discapacidad.
“Por ellos hacemos este exhorto a las autoridades en el estado de Coahuila para su inclusión, para que sean tratados y respetados con igualdad como cualquier otro”, insistió.
Asimismo, lamentó que universidades públicas y privadas han frenado la inclusión a este sector vulnerable, por lo que reiteró que se debe tratar a todas las personas con respeto y se debe garantizar el derecho a la educación.
Este miércoles, acudió un grupo de jóvenes con discapacidad auditiva, quienes a través de lenguaje de señas, externaron que han sido discriminados en diversos ámbitos por su condición, por lo que esperan que haya más apertura por parte de la sociedad.
A nivel nacional, el legislador dijo que en esta condición hay cerca de 2.4 millones de mexicanos, siendo que en Coahuila, apenas el 3 por ciento de la población sufren de rechazo.