El Ayuntamiento de Saltillo obliga a todos los elementos de la Policía Municipal a firmar por anticipado una renuncia voluntaria, por lo que más de 30 agentes presentaron demandas ante la Junta de Conciliación y Arbitraje de la Secretaría del Trabajo, informó el abogado Roberto Herrera Hernández.
El jurisconsulto, que lleva el caso de los policías inconformes, denunció que el municipio pretende evitarse juicios y el debido procedimiento administrativo o simplemente, porque el mayor Clemente Yáñez amanece de malas y da de baja a efectivos a su antojo.
Las demandas, que son por salarios caídos acumulados hasta el momento, sueldos devengados e indemnización -tan sólo de 17 efectivos-, suman casi 3 millones de pesos que deberá pagar la administración de Isidro López para evitar ser embargado.
El litigante narró que desde fines de 2015, los elementos de la municipal los hicieron firmar la renuncia “por cuestiones prácticas” y en el momento que les parecía adecuado lo hacían efectivo para evitar largos trámites y pagos.
“Traigo cuatro personas en esa situación pero tengo entendido que son más de 30 los que están interponiendo una demanda por obligarlos a firmar esta renuncia, por no haber sido de forma voluntaria y de igual manera hay oficiales a los que se les amenaza con daño físico en caso de no firmar la baja”, externó.
Detalló que entre loe elementos despedidos están jefes de sector, comandantes y policías que al no ser bien vistos por el mayor, de inmediato les saca este papel ilegal.
OPB