Leslie Delgado
En un esfuerzo por abordar de manera integral el problema del embarazo adolescente, la organización Matatena, liderada por su presidenta, Cyntia Moncada, firmó un convenio de colaboración con el Congreso del estado. Este acuerdo que también fue signando por la Secretaria de la Mujer, Mayra Valdés y la diputada local, Marimar Treviño busca desarrollar una investigación exhaustiva sobre antecedentes legislativos y proponer reformas que respondan a las necesidades reales de la población afectada.
“Hoy es un día muy importante para nosotras porque este convenio nos abre las puertas del Congreso para que las modificaciones a las leyes se nutran de las necesidades de la ciudadanía, específicamente de infancias, adolescencias y mujeres”, expresó Moncada.
Diagnóstico y propuestas: una aproximación integral
La investigación incluirá una revisión de las iniciativas legislativas propuestas en años anteriores, evaluando si estas se tradujeron en políticas públicas efectivas y su grado de implementación. En caso de encontrar deficiencias, se buscará generar propuestas más acertadas y aplicables.
Matatena destacó algunos hallazgos previos de un informe publicado en 2020. Entre estos, se subrayaron dos factores clave:
Progenitores mayores de edad: Una gran proporción de los padres en casos de embarazo adolescente resultaron ser adultos, configurando posibles delitos como violación o estupro.
Diferencias por edad: Se hizo énfasis en separar los embarazos de menores de 15 años, donde el embarazo es resultado de un delito, de los de mayores de 15 años, ya que las circunstancias suelen ser distintas.
Estas observaciones llevaron a una mayor precisión en las estadísticas estatales y un enfoque más específico en las políticas públicas.
El contexto del embarazo adolescente
Según Moncada, el embarazo adolescente es un fenómeno complejo que no puede abordarse desde una sola perspectiva. “No podemos decir que se debe únicamente a la falta de acceso a métodos anticonceptivos o que siempre es producto de una violación. Es un problema que involucra violencia, desigualdad socioeconómica, falta de acceso a la educación y a la salud, entre otros factores”, afirmó.
Si bien se ha reportado una leve disminución en los embarazos en adolescentes mayores de 15 años, el índice de embarazos en menores de 15 años no ha mostrado un cambio significativo, lo que indica áreas críticas que requieren mayor atención.
Este convenio marca un precedente en la región, ya que no se tiene registro de acuerdos similares en otras partes del país. A través de esta colaboración, se espera no solo mejorar las leyes actuales, sino también generar propuestas que impacten directamente en la prevención del embarazo adolescente y en la atención de las menores afectadas.