En el marco del Año del Jubileo de la Misericordia, decenas de migrantes de Nicaragua, El Salvador Guatemala, Honduras y México, marcharon ayer por las calles de la ciudad para pedir tránsito libre y migración sin violencia.
Con la tutela del padre Pedro Pantoja Arreola, asesor de la Casa del Migrante en Saltillo, los migrantes pidieron a la sociedad evitar la discriminación y la desigualdad social que se genera contra quienes víctimas de la pobreza buscan mejorar sus condiciones de vida.
Pantoja Arreola dijo que los abusos contra estos grupos siguen y son muchas las denuncias públicas por la violencia que reciben, pero ni los mismos organismos protectores de los Derechos Humanos han frenado los abusos por parte del estado.
“Lamentablemente se ha acrecentado la crueldad, donde se ha sacrificado la vida de muchos migrantes”, expresó.