El gobernador Rubén Moreira Valdez aseguró que no hará ninguna recomendación a su sucesor Miguel Ángel Riquelme Solís y sostuvo que tras concluir su mandato se retirará de la política.
Moreira tuvo una reunión con su gabinete legal y ampliado en Palacio de Gobierno, donde habló de los avances en las acciones de su administración rumbo a su sexto y último informe de gobierno que será en noviembre, lo que queda pendiente y también los trabajos de entrega-recepción que ya iniciaron desde hace dos semanas con el equipo de transición del gobernador electo.
El mandatario aseguró que no dejará nada por escrito a Riquelme Solís porque no es necesario.
“Hay una leyenda que dice que nosotros, los que nos vamos, cuando ya no sea gobernador de Coahuila, debemos dejar tres cartas al sucesor; la primera deberá abrirla cuando tenga el primer problema y echarle toda la culpa al que se va, la segunda responsabilizar a los gringos y la tercera empezar a escribir las propias.
Yo creo que aquí no hay necesidad de eso”. “Miguel Riquelme Solís es un hombre que conoce bien la administración pública estatal, fue secretario de Gobierno y de Desarrollo Social, diputado federal, alcalde; es un hombre que conoce bien, entonces él sabrá qué hacer y cómo gobernar”.
Moreira Valdez sostuvo que lo que menos tiene que hacer como exgobernador es tratar de aconsejar a quien llega.