LAURA ESTRADA
Con el llamado a participar en los festejos y reforzar la fé, la iglesia católica de Acuña dio inició a las celebraciones a la virgen de Guadalupe, con la primera peregrinación, la coronación de la virgen e imposición de escapularios, en la que participaron diversos grupos de danzantes, así como feligreses que se unieron al inicio de las festividades que concluyen el 12 de diciembre con una misa oficiada por el obispo de la Diócesis de Piedras Negras, Gerardo Alonso Garza Treviño.
La peregrinación que se realiza cada año para arrancar las celebraciones, encabezada por el grupo de catequistas de la iglesia de Guadalupe, partió del acostumbrado punto de reunión sobre la avenida Guerrero hacia la parroquia, en su trayecto danzaron diversos grupos de matlachines y se unieron desde niños hasta adultos que esperaban el paso de la procesión, quienes mostraron su fé a la guadalupana con sus cantos, su danza y su música.
Al llegar a la iglesia de Guadalupe, fueron recibidos por el padre Jesús Guevara y los niños que hicieron la coronación de la virgen, mientras los peregrinos se dispusieron a participar de la santa misa que fue oficiada para abrir esta fiesta tan importante para los mexicanos y especialmente para los fieles a la virgen de Guadalupe. Durante la celebración de la eucaristía se impusieron los escapularios y se pidió por la salud de los enfermos y por quienes su fé, da testimonio de las bendiciones de la virgen.
El párroco invitó a la comunidad a acercarse a la casa del señor, aprovechar el novenario de la virgen para agradecer a Dios y así como se va a a casa de los abuelos, así se acerquen a la casa de María para quien todos son hijos, aunque pecadores luchan por hacer el bien, expresó.