Coahuila entre los estados con mayor tasa de deserción a nivel media superior

De los cinco millones de jóvenes que asisten a la educación media superior, entre 600 y 700 mil desertan cada año, sin que el sistema educativo tenga registro claro actual de las razones por las que abandona la escuela.

De acuerdo con las ultimas cifras de la Secretaría de Educación Pública, en el “Análisis del Movimiento contra el Abandono Escolar, 2015”, las razones son: 41 por ciento  escolares-institucionales; 38 por ciento económicas; 16 por ciento no especificado; y 5 por ciento por razones personales o familiares.

El Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) presentó las “Directrices para mejorar la permanencia escolar en la Educación Media Superior” en las que destacó los diez estados con mayor tasa de deserción.

Entre ellos está: Tamaulipas, Chihuahua, Durango, Ciudad de México, Coahuila, Nayarit, Campeche, Baja California, Morelos y Guanajuato.

De acuerdo con otro estudio de la SEP, en 2012 había un 1.1 por ciento de estudiantes que referían que la razón era por cuestiones de inseguridad.

En el actual estudio del INEE los expertos refieren que la seguridad en las regiones vuelve a ser un tema preocupante, aunque aseguran que no hay claridad en las cifras por la falta de seguimiento de los planteles escolares a cada estudiante que deja la escuela, ” nadie sabe quiénes son los desertores, sabemos quiénes se quedaron pero no quiénes se fueron, entonces es muy difícil, no hay un seguimiento de los desertores, por eso no podríamos tener cuántos desertaron por razones que tuvieron que ver con un evento de violencia”, aseguró Teresa Bracho, consejera del INEE.

En tanto que la consejera Margarita Zorrila, propuso que expertos “podrían colaborar aportando metodologías sencillas para que los planteles puedan dar seguimiento a sus estudiantes uno por uno y la escuela tendría una herramienta que le permitiría dar ese seguimiento y tener una mayor capacidad de identificar los factores en riesgo y de poder actuar”.

El titular de la Unidad de Normatividad y Política Educativa del INEE, Francisco Miranda, expuso que hay una “necesidad de garantizar la seguridad dentro de la escuela pero también en el contexto escolar, no solamente es dentro de la escuela, también los contextos escolares cada vez son más importantes y por eso se necesita un esquema intersectorial. Ya no es solamente un asunto de la autoridad educativa sino un asunto más articulado de trabajo”.

Los integrantes del INEE consideraron que las acciones que ha tomado el gobierno federal con respecto al abandono escolar son adecuadas.

“Estamos en la ruta correcta, pero hay que fortalecer los procesos de implementación sobre todo en el ámbito de las escuelas”, dijo Miranda.

Añadió que hay tres grandes tareas para atender esta problemática:  la prevención, dado que los sistemas de alerta temprana que se iniciaron con el “Movimiento Síguele” se continúan pero tenemos problemas de implementación y fortalecimiento “habrá que fortalecer que esos sistemas de alerta temprana funcionen de manera adecuada”, expuso.

El segundo tema donde se ha avanzado menos es en la atención inmediata y que incluye tres focos rojos: dejar de asistir a clases, comenzar a reprobar materias y el comportamiento del joven estudiante.

Al identificarse estos aspectos se deben tomar acciones preventivas.

El tercer tema es la reincorporación sobre todo para los jóvenes que ya tienen más de dos años de haber dejado la escuela, “lo cual será muy difícil por lo que se tienen que ofrecer alternativas”, alertó el experto.

“No sirve mucho si tenemos una gran política nacional o un decreto, lo que necesitamos es que cada plantel escolar cuente con las normas, los procedimientos y los recursos para que estas tres tareas de prevención, atención y reformación se puedan desarrollar de manera natural”, detalló.

El INEE encontró una constante que diferencia a los ámbitos escolares urbanos a diferencia de los rurales, en los primeros hay mayor deserción.

“El crecimiento urbano, las oportunidades de empleo que hay para los jóvenes son empleos precarios, pero ese contexto hace que muchos jóvenes prefieran irse al McDonalds o a otro tipo de mercado no formal o informal y eso afecta más el tema de la permanencia escolar”, explicó.

“A diferencia de estados como Oaxaca por ejemplo que es sorprendente que no tenga un nivel tan alto de deserción por el contexto, los jóvenes realmente la media superior es una gran oportunidad para permanecer, entonces se dan menos que contextos urbanos”, aclaró.

En cuanto a los costos que representan estas recomendaciones, Bracho dijo que “toda acción pública tiene un costo, no está decidido porque la respuesta que da la autoridad es lo que determinará cuál es el costo de las acciones involucradas; sin embargo como ven muchas de las acciones están orientadas a fortalecer acciones que en teoría están aplicándose en curso”, concluyó.