Saltillo, Coahuila / 04 Abril 2018
Por: David González
El Centro de Integración Juvenil (CIJ) es una de las pocas asociaciones dedicadas exclusivamente a la atención del problema de drogas en niños y adolescentes y a la que llegan mensualmente 30 nuevos menores que tuvieron contacto con sustancias prohibidas.
La directora del CIJ Saltillo, 05, recordó que los grupos de esta edad comienzan con el consumo de cigarro, alcohol, marihuana y solventes en este orden.
Recordó que este organismo fue creado desde hace casi 45 años y constituido como asociación civil que imparte asistencia social especializada en atención integral a la farmacodependencia enfocada a los niños y jóvenes.
Resaltó que este centro cuenta con programas de tratamientos, prevención y enseñanza e investigación que son atendidos por especialistas de las áreas de piscología, psiquiatría, médicos y trabajadores sociales, así como terapeutas.
Señaló que los factores de riesgo cada vez están más cercano a los menores que ven más cercano las drogas en su círculo, que aunado a una falta de supervisión y la ausencia de un vínculo afectiva, hacen que prueben estas nuevas emociones que en este caso son las drogas.
Dijo que cada vez el adolescente se ve más identificado cuanto esta en esta condición con grupos de amigos, las pandillas o las bandas en las colonias que los acercan por primera vez a las sustancias prohibidas.
Subrayó que se dan diversos tratamientos como son los de primera vez, es decir que apenas probaron como curiosidad, reto u otra causa el alcohol y las drogas, pero también están los experimentadores que pasan de una sustancia a otra y que pasan a una real adicción que los atrapa.
“Toda la prevención esta encaminada a retrasar la edad de inicio ya que cada vez es más temprana los rangos en que encontramos a los menores experimentando o probando alguna sustancia”, explicó.
Alertó que el 50 por ciento de las atenciones que dan en el caso de famacodependencia o menores que llegan a atención por primera vez son del nivel secundaria, es decir que está en el rango de los 12 a los 15 años.
Rechazó el mito de que las adicciones sólo se dan en el medio socioeconómico bajo, sino que el problema se da en todos los niveles, pero al ser una institución a la comunidad, no acuden los de altos ingresos sino que se atienden en clínicas particulares.
Precisó que actualmente se tiene a 120 pacientes en tratamiento, donde recalcó que se hace siempre en conjunto con los padres de familia o familiares cercanos para blindar una reincidencia y hacer más sólidos los vínculos familiares.