Castigan a víctima de violencia familiar con brazalete electrónico

MOISÉS SANTIAGO H

Por  denunciar a su pareja por violencia familiar, Edith Villarreal Calixto fue sentenciada a portar el brazalete electrónico, tras ser considerada por las autoridades como una peligrosa criminal y como medida cautelar se le restringió e impidió la convivencia con sus tres menores hijos. 

La afectada relató que el supuesto agresor de nombre Ismael Ruiz Solis es pastor de una iglesia evangélica en la colonia Maria de Nueva Rosita; comentó que él acudió con las autoridades señalando que era ella quien lo amenazaba y tras presentar como prueba un cuchillo ante el Ministerio Público se determinó que la mujer merecía esta medida restrictiva portando el brazalete electrónico. 

La joven madre de familia señaló que tras 11 años de abusos por parte de su marido asistió a terapia psicológica en el 2016 tratando de sobrellevar la situación, pero todo fue en vano cuando el pastor evangélico la denunció por las supuestas amenazas que tras una determinación oficial por parte del juez de lo familiar se optó por tomar la medida cautelar en contra de la mujer. 

Dijo que tras las audiencias con las autoridades, él aseguró que ella era una mujer violenta y tras hacerlo con tanta seguridad bajo dramatización convenció al Ministerio Público y al juez quien finalmente logró dictaminar la situación que terminó con la imposición del brazalete electrónico. 

Los tres menores están bajo el resguardo del pastor pese a que son de apenas de 10, 8 y 6 años de edad quienes hasta el momento no le permite verlos desde el mes de julio del presente año. 

Edith asegura que no es creíble la versión que se presenta puesto que el hombre es de una considerable estatura y fácilmente podría defenderse ante cualquier agresión por lo que opinó que simplemente logró ganarse a las autoridades.