Saltillo, Coahuila / 11 Diciembre 2018
Por: Daniella Giacoman
Sin vigilancia policiaca y con la bendición de la Morenita del Tepeyac, cerca de 600 campesinos adheridos a la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) acudieron una vez más, a darle gracias a la Virgen de Guadalupe por los favores recibidos.
En un frío inicio de semana, alrededor de 600 personas partieron desde la plaza de las Ciudades Hermanas con rumbo al Santuario de Guadalupe. Comandados por dos jinetes y dos tractocamiones que llevaron decoradas en alusión al próximo día de la Morenita del Tepeyac, jóvenes, padres de familia y mujeres con niños en brazos, caminaron cerca de 40 minutos.
Entre el claxon intolerante de los automovilistas que transitaban por Coss y a la altura de Emilio Carranza, decenas de saltillenses entonaban: “este cerro elijo, este cerro elijo, este cerro elijo para hacer mi altar” mientras portaban banderas verdes de la UNTA con la leyenda Viva Zapata.
Y es que a diferencia de otras peregrinaciones en donde son apoyadas por alguna patrulla o policía que les da el paso rumbo al santuario, no hubo vigilancia, incluso, un integrante de la UNTA se colocó en el cruce de Coss y Emilio Carranza, cerca de Coppel para evitar que algún incidente que pusiera en riesgo la integridad de los fieles devotos de la Morenita, cuyo día es el 12 de diciembre.
De acuerdo con Nancy Nájera, fueron cerca de 600 personas quienes continuaron con esta tradición que es impulsada desde la creación de la UNTA en la localidad, en donde nunca olvidan dar gracias a la también conocida como emperatriz de América, Virgen de Guadalupe.
Además de los cantos que de momentos eran intermitentes, el grupo de danzantes Señora de Dolores de la colonia Tanquecito hacían retumbar los corazones de quienes seguían el contingente o de quienes pasaban por el lugar.
Mientras tanto, afuera del Santuario de Guadalupe ya se encuentran algunos puestos de comida, accesorios y otras curiosidades, pues el miércoles desde temprano se convertirá en uno de los lugares más visitados por los saltillenses.
Luego de más de 40 minutos de camino donde el sol aminoró los estragos por el aire frío de este lunes, el contingente llegó al templo donde fueron recibidos por el cura de este lugar quien les roció agua bendita a su llegada para luego continuar con la misa.