Por: David González
La apatía de los padres y la falta de apoyo para fomentar una alimentación saludable provoca que cada vez más niños tengan sobrepeso y obesidad, al tiempo que los preadolescentes presentan diabetes tipo dos que antes era una enfermedad exclusiva de adultos.
El director del Hospital Universitario (HU) de Saltillo, Luis Alfonso Carrillo González, lamentó que los casos de diabetes en niños eran raros y ahora atienden a más menores con este problema.
Alertó que hay bebés con sobrepeso que son dejados a su suerte y cuando llegan edades entre ocho y 12 años desarrollan la diabetes y problemas en rodillas, en el páncreas y otras consecuencias de la enfermedad.
“El sobrepeso de los niños es difícil de cuantificar, depende mucho de su edad, pero es alarmante que hay pequeños que llegan con piedras en la vesícula, colesterol alto y los preadolecentes desarrollaron diabetes”.
Detalló que en el tiempo que lleva la clínica de obesidad en funciones, hubo entre tres y cuatro casos problemas muy avanzados.
Explicó que el hecho que este índice suba en los últimos años es porque los padres no están capacitados para atender un problema de obesidad en los hijos, a quienes consideran “normales”. Sin embargo, destacó que el principal problema es la educación en la casa, pues no existe una cultura de alimentación para apoyar al menor que acude a tratamiento para que se fomente en él un hábito del buen comer y que ningún miembro de la familia lo haga desistir de su esfuerzo.
“Los papás se niegan a asistir al tratamiento completo de su hijo ya que no comprenden la importancia del programa de entrenamiento y ejercicio constante que deben de tener todos los miembros de la casa ya que luego el niño recaería”, indicó el especialista.