Alcohol, el principal verdugo de los conductores coahuilenses

Por: Miroslava Zapata

De cada 10 accidentes automovilísticos que terminan en la fatalidad, siete están relacionados con el consumo de alcohol, en tanto, el resto es por causas como manipular el celular mientras se conduce, exceso de velocidad, cansancio o fallas mecánicas.

Esto fue informado por el vocero de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), Jesús Carranza, quien agregó que la edad promedio de los fenecidos al volante se ubica entre 20 y 29 años. Por otro lado, informó que en la entidad casi 200 personas mueren al año por accidentes viales.

Para el vocero, esta cifra podría ser algo relativa y aventurada, pues asegura que puede variar, ya que hay accidentes viales donde el número de muertos se aumenta ante la participación de distintos tipos de vehículos.

“Hay ocasiones en las que chocan camiones, autobuses o transporte de personal que van llenos y que por ello al momento de un trágico accidente fallecen varias personas, es ahí donde se ve que las cifras promedio son incrementadas”, detalló.

Para Jesús Carranza, el número de accidentes asciende en los periodos vacacionales, pues al no tener compromisos laborales muchas de las personas optan por desvelarse, beber alcohol hasta el amanecer y luego conducir. Junio, julio y agosto son los meses en los que más se disparan las cifras.

Agrega que sin duda alguna, los sábados y domingos por las noches o madrugadas es cuando el foco rojo de accidentes luce por más tiempo encendido, pues los teléfonos del Sistema Estatal de Emergencia 911 no dejan de sonar en su mayoría para solicitar el apoyo de los técnicos en urgencias médicas y de los oficiales de tránsito.

Pese al gran número de muertos que hay cada año por accidentes viales, el estado está fuera de la lista de las 10 entidades que más presentan esta problemática, entre las cuales destacan Nuevo León, Quintana Roo, Ciudad de México, Sinaloa, Campeche y Jalisco.

En Coahuila, los municipios que tienen más accidentes viales con tintes fatales son Saltillo, Torreón, Piedras Negras, Ramos Arizpe y Monclova. Agrega que para la PGJE es muy importante la disminución de estos incidentes y por ello imparten pláticas en algunas instituciones educativas para concientizar a los estudiantes de universidades y preparatorias de las consecuencias de manejar bajo los influjos del alcohol.

Para las autoridades estatales no sólo es importante tocar el tema de evitar beber si se va a conducir. Por ello, los estudiantes también reciben pláticas sobre las consecuencias de combinar el volante con el celular, maquillaje y cansancio.

“Pareciera mentira, pero manejar cansado o con sueño es más peligroso que el manejar tomado, pues cuando la persona está bajo el influjo del alcohol, volantea o maniobra, pero al estar cansado en cualquier momento dormita y eso trae consigo un fatal accidente”, manifestó.

Combinación letal

En todo el territorio nacional, los accidentes viales representan la primera causa de muerte en la población de 15 a 29 años, mismos que son ocasionados en la mayoría de las veces por combinar las bebidas alcohólicas con el volante.

De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), entre 40 y 60 por ciento de los accidentes que tienen consecuencias letales se relacionan con el consumo de bebidas alcohólicas.

Este problema se agudiza entre los hombres, pues los estudios realizados por este organismo revelaron que un varón menor de 18 años tiene el doble de posibilidades de fenecer a causa de este tipo de siniestros en comparación con las mujeres. Además, el Consejo Nacional Para la Prevención de Accidentes (Conapra) reveló que en promedio cada año 1.4 millones de personas resultan con lesiones y 1.2 millones terminan con alguna discapacidad a causa de los choques.

Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) señalan que durante 2015 se registraron 378 mil 232 accidentes de tránsito en las zonas urbanas del territorio nacional. De ese total 1.1 por ciento correspondieron a incidentes fatales, lo que arrojó un saldo de cuatro mil 601 víctimas.