DAVID GONZÁLEZ
@dahevy
El abasto de agua potable se encuentra al límite en Coahuila y con focos rojos en los municipios del Sureste, principalmente Saltillo y Ramos Arizpe, por lo que es necesarios crear estrategias para infiltrar el agua de la sierra de Zapalinamé en los mantos acuíferos para garantizar el líquido a las futuras generaciones.
Así lo advirtió el experto en el tema y secretario técnico de la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento, Enrique Salazar, justo en el marco del Día Internacional del Agua, que hoy se celebra.
El funcionario estatal subrayó que en el caso de Torreón, el problema es el límite al que llega en la perforación de pozos.
En otras partes de La Laguna, la región Centro, Norte y Carbonífera, dijo que hay equilibrio, en tanto se utilicen fuentes alternas como las presas que los circundan.
Enrique Salazar dijo que Coahuila es la entidad con menos precipitación pluvial, sólo abajo de Baja California, con un promedio de 350 milímetros anuales, comparado con Tabasco, que tiene tres metros de agua al año.
Dijo que esto transforma a la entidad en semidesierto y por consecuencia existe menos lluvia que regenere los pozos de agua que son utilizados para el consumo humano.
“El foco rojo es en el sureste, por las condiciones climáticas de infiltración, estar a mil 600 metros sobre el nivel del mar hace que lo poco que llueve se escurra y al no contar con cuencas lo que se logrea infiltrar es lo que abastece los pozos”, explicó.
Sobre los pozos advirtió que han bajado peligrosamente los niveles en los últimos 10 años y en este momento el abasto es sostenible.
“Hay que hacer un balance en la Sierra para lograr la infiltración, como presas de gaviones, bordos, la forestación de la sierra, para retener agua y garantizar la sustentabilidad para las próximas generaciones”, indicó.
OPB