Coahuila / 22 de Marzo de 2019
Por: Redacción
Tras ser desmentido por la CFE y por su director general, Manuel Bartlett Díaz, el senador por Morena, Armando Guadiana Tijerina admitió que el pasado martes no hubo una reunión entre él, el delegado del gobierno federal, Reyes Flores Hurtado y Bartlett Díaz ni que se haya acordado una compra emergente de carbón por parte de la paraestatal para las plantas carboeléctricas Carbón I y II ubicadas en Nava.
Más aún, el senador confesó que la fotografía adjunta a su comunicado, -desconocido por la Comisión Federal de Electricidad y por Bartlett-, era “de archivo” y que fue Reyes Flores – a instrucción suya-, quien se entrevistó con Bartlett en Palacio Nacional y no en las oficinas de la CFE.
Sin embargo, un día después de haber enviado el comunicado y antes de ser desmentido por la paraestatal y el propio Bartlett, el pasado miércoles por la mañana en entrevista para Capital Noticias en Coahuila, Guadiana confirmó la reunión y el acuerdo para la compra emergente del mineral a fin de aliviar la crisis económica en la región Carbonífera ante la falta de pedidos de carbón para la CFE.
En conferencia de prensa de este jueves por la mañana, el coahuilense admitió ser empresario del ramo minero, sin embargo descartó que haya conflicto de intereses en su labor como Senador y presidente de la Comisión de Energía y su actividad empresarial
Y es que este martes la oficina del senador por Morena difundió un comunicado en el que se señalaba que: “En reunión conjunta con Manuel Bartlett, Director de la Comisión Federal de Electricidad; Carlos Morales Mar, Director de Operaciones de la CFE; el Senador Armando Guadiana y Reyes Flores Hurtado, Coordinador del Gobierno Federal en Coahuila, se acordó la aprobación de los pedidos emergentes de Carbón para las plantas Carboeléctricas Carbón I y II, ubicadas en Nava, Coahuila”.
Por su parte, Antonio Álvarez, presidente de la Unión de Organismos Empresariales en la región Centro, consideró que para evitar males interpretaciones o que pudiera darse un favoritismo sobre sus empresas, el senador debería renunciar a la Comisión de Energía, ya que se deja entrever un posible conflicto de interés.
“Es algo que se queda en el ambiente pues de cualquier forma que se le vea esto representa un conflicto de interés, el hecho de estar con un cargo federal como senador y a la vez estar encargado de la Comisión de Energía y luego estar haciendo gestiones para que se reactive la compra de carbón para los carboneros pues sí deja entrever un conflicto de interés y pareciera que está favoreciendo sus propios intereses”, declaró.