Elizabeth Hernández
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) expresó su preocupación sobre las investigaciones realizadas por las autoridades mexicanas en relación a las supuestas ejecuciones extrajudiciales cometidas en Tlatlaya, Estado de México, hace casi dos años.
El organismo mostró preocupación ante la posibilidad de que las investigaciones no estén llegando a ninguna parte.
“Estamos sumamente preocupados que casi dos años después de la comisión de serias violaciones a los derechos humanos en Tlatlaya, Estado de México, el caso siga estancado en la impunidad y a las víctimas se les niegue su derecho a la justicia y la verdad”, expresó la Portavoz de la Oficina del Alto Comisionado Shamdasani , en una conferencia de prensa en Ginebra, Suiza.
Durante su última visita a México el pasado octubre de 2015, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, dijo que el caso Tlatlaya sería una “prueba para las autoridades” en su compromiso en la lucha contra la impunidad.
También dijo que el caso Tlatlaya sería observado de cerca por él y su equipo de trabajo.
“Hacemos un llamado a las autoridades de México para garantizar una investigación pronta, completa, efectiva, imparcial e independiente sobre este caso”, resaltó ONU DH.
Por su parte, ONU DH apuntó que se deberían extender las investigaciones para examinar a todos aquellos que puedan ser responsables, incluidos oficiales militares de alto rango que tengan responsabilidad de mando, así como a quienes hubiesen podido falsificar u ordenado la falsificación de la escena del crimen”, agregó.
El organismo de la ONU encargado de la protección de los derechos humanos reporta que, de acuerdo con la Comisión Nacional para los Derechos Humanos (CNDH) de México, 22 personas fueron asesinadas, de las cuales, al menos 12 fueron ejecutadas de forma extrajudicial.
A su vez, siete militares fueron arrestados por el incidente, pero en octubre de 2015 a cuatro de ellos se les retiraron los cargos y la semana pasada liberaron a los tres restantes. El juez correspondiente al caso argumentó falta de pruebas en contra de los militares.
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