Tokio.- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegó hoy a Japón para participar en la cumbre del Grupo de los Siete países más industrializados (G-7) en la ciudad japonesa de Shima y después realizar una histórica visita a Hiroshima.
Procedente de Vietnam, el avión presidencial Air Force One aterrizó esta tarde en el aeropuerto internacional de Chubu, al sur de la ciudad de Nagoya, desde donde Obama partió en helicóptero hacia el hotel donde los líderes se reunirán a puerta cerrada, en la isla de Kashiko.
El mandatario estadounidense, quien fue recibido en la pista del aeródromo por representantes del gobierno japonés y por la embajadora de su país en Tokio, Caroline Kennedy, tiene previsto reunirse este mismo miércoles con el primer ministro japonés, Shinzo Abe.
Los otros jefes de Estado participantes en la cumbre del G-7 (Alemania, Canadá, Francia, Italia y Reino Unido) también arribarán a Japón entre este miércoles y mañana jueves, cuando comenzará la reunión de dos días, según la agencia japonesa de noticias Kyodo.
La cumbre del G-7, la primera de este tipo que se celebra en Asia en los últimos ocho años, se centrará en la situación de la economía global, la lucha antiterrorista y la crisis de los refugiados derivada de la guerra de Siria, entre otros temas.
Obama tratará con Abe estos y otros asuntos durante su reunión, entre los que también destaca el reciente asesinato de una joven japonesa supuestamente perpetrado por un exmilitar estadounidense empleado en la base de Kadena, en Okinawa (sur de Japón).
Tras la cumbre del G-7, Obama viajará el viernes a Hiroshima, lo que supondrá la primera visita de un jefe de la Casa Blanca a esa ciudad, blanco de la bomba atómica estadounidense el 6 de agosto de 1945, en el marco de la Segunda Guerra Mundial.
El presidente estadounidense tiene previsto realizar un discurso en una breve ceremonia y hacer una ofrenda floral en el cenotafio donde se encuentran los nombres de las más de 250 mil víctimas.
Sin embargo, Obama confirmó en una reciente entrevista con la cadena japonesa NHK que no ofrecerá disculpas, porque cree que “es importante reconocer que en plena guerra los líderes toman todo tipo de decisiones”.
En el tercer y último día de su visita en Vietnam, Obama se reunió en la ciudad de Ho Chi Minh con unos 800 jóvenes, a quienes exhortó a combatir el cambio climático y recordó que el país asiático es uno de los más afectados por el fenómeno ambiental.
JCS/OPB