El presidente de Argentina, Mauricio Macri, abandonó anoche la clínica en la que fue sometido a una revisión tras sufrir una “leve arritmia” y ya se encuentra en su residencia, informaron fuentes oficiales.
El mandatario recibió el alta a las 23:15 hora local (02:15 GMT) y salió caminando del centro hospitalario, cercano a la residencia presidencial de Olivos, en la provincia de Buenos Aires.
Macri abandonó la Clínica Olivos la noche del viernes, luego de hacerse estudios cardíacos aconsejado por el equipo médico presidencial, que le había detectado por la tarde una arritmia, informó el diario Clarín.
Según fuentes médicas, Macri sufrió una fibrilación auricular, que es una arritmia que no sería grave.
“Tuvo palpitaciones. Se revirtió la arritmia y lo dejamos en reposo un par de horas”, dijo Simón Salzberg, de la Unidad Médica Presidencial, tras haberle dado el alta, citó el diario La Nación.
Respecto a los estudios, el vocero presidencial, Iván Pavlosvky, precisó que Macri fue sometido a distintos chequeos cardíacos, para los que se necesitó “una pequeña sedación”.
Fuentes de la Casa Rosada confirmaron que el presidente se sintió mal antes y después de un encuentro con periodistas en la Quinta de Olivos y fue llevado a esa clínica privada.
El estado de salud del presidente generó una alarma en la tarde del viernes luego de que un canal de noticias informara sobre su intempestivo internamiento.
Sin embargo, la Casa Rosada desmintió el dato e incluso distribuyó una fotografía del mandatario junto con un grupo de periodistas a los que recibió poco antes.
La imagen intentaba mostrar a Macri en actividad, pese a que ya se encontraba internado en el más completo hermetismo, pero como los médicos decidieron que permaneciera más tiempo en el hospital, el gobierno tuvo que confirmar la información.
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