En menos de una semana, la India ha sido escenario de la violación y quema de dos adolescentes de 16 y 17 años. La primera de las víctimas falleció el viernes pasado, mientras que la segunda se discute entre la vida y la muerte debido a las quemaduras que presenta en gran parte del cuerpo.
En el caso más reciente, una adolescente india de 17 años fue violada y prendida en llamas con queroseno; los hechos ocurrieron durante la víspera en el distrito de Pakur, ubicado en el nororiental estado de Jharkhand, informaron las autoridades de aquel país.
“La joven sufre quemaduras de primer grado en el 70 por ciento del cuerpo”, informó el responsable de la policía local, Shailendra Barnwal, quien no reveló la identidad de la joven, pero aseguró que está hospitalizada luchando por su vida.
La familia de la menor denunció que fue secuestrada la noche del jueves por cuatro hombres, presuntamente ebrios, de una boda a la que había asistido en una localidad cercana; los secuestradores la llevaron a un lugar apartado y abusaron de ella.
El padre de la víctima denunció los hechos ante el consejo local, pero los sospechosos fueron dejados en libertad tras una multa; la familia aseguró que los hombres irrumpieron en su casa, los golpearon y prendieron fuego a la menor.
Estos casos se unen a otros dos presuntos ataques sexuales masivos, ocurridos el mes pasado contra una niña de ocho años y otro joven de 16 en el estado de Jammu y Cachemira, los cuales desataron una ola de protesta.
Los delitos en contra de mujeres han aumentado pese a las duras leyes promulgadas en 2013 a raíz de la violación en grupo de una mujer de Nueva Delhi y su posterior muerte en 2012, lo que provocó protestas masivas en todo el país.
Los incidente de violación de niñas en la India aumentaron más del 82 por ciento durante 2016, en comparación con los casos registrados en 2015, según datos de la Oficina Nacional de Registro del Crimen de aquel país.