Saltillo, Coahuila / 17 Abril 2018
Por: Sonia Pérez
Al asegurar que personalmente cree en el libre albedrío y que son las personas las que deben decidir la manera en que donarán sus órganos, el hospital Universitario seguirá los protocolos de consentimiento informativos y de autorización de los familiares en la realización de trasplante de órganos, aseguró el director del nosocomio Lauro Cortes.
Luego de que el Senado decidiera que todos los mexicanos mayores de 18 años se convierten de manera tácita en donadores de órganos, el directivo sostuvo que el hospital evitará problemas legales siguiendo los protocolos de admisión hospitalaria que son muy estrictos.
“Nosotros tenemos que respetar los consentimientos informados para evitar problemas legales, ya ven lo que está pasando a nivel nacional; los protocolos de admisión hospitalaria son muy estrictos y hay que darles cumplimiento cabal y hay que respetar la dignidad de la persona humana y el libre albedrío”, sostuvo el directivo.
“Yo soy un firme creyente, que una de las cosas más preciadas que tenemos es el libre albedrío, creo que el esquema de que uno, de forma voluntaria y consciente decida qué se debe hacer con su cuerpo una vez que fallece, debe ser el camino a seguir”, expuso.
El directivo del Hospital Universitario aseguró que para promover la donación de órganos se debe recurrir a la cultura, porque todos debemos estar convencidos que las donaciones son buenas y que deben seguir evolucionando para que se pueda demostrar que se puede dar vida en vida.
Cortés dijo respetar mucho otras posiciones, pero destacó que en lo particular él cree que debe ser una decisión personal y que esa postura debe ser respetada por la familia por lo que, si la decisión de la persona era donar sus órganos, quienes se quedan deben cumplimentar ese deseo.
Recalcó que esta tendencia es europea para países que tienen otra perspectiva de la vida y otras religiones, con componentes culturales diferentes, pero que se debe ser muy cuidadoso al querer implementar otras decisiones que en otros lugares del mundo han sido exitosas pero tal vez no en México.