Luego de reportar en enero la caída más abrupta de los últimos cuatro años, la confianza del consumidor empieza a recuperarse y en julio logró una escalada mensual de 1.8 por ciento, la cifra más alta en lo que va del año.
Según el Índice de Confianza del Consumidor (INC) que recopila la calificación de los mexicanos sobre el desempeño económico nacional y al interior de sus hogares, en julio avanzó significativamente en dos de sus cinco componentes.
En primer lugar crecieron las expectativas de los hogares para poder comprar bienes duraderos, ya sean muebles, televisor, lavadora, y otros aparatos electrodomésticos, este factor se elevó 3.9 puntos, seguido de la confianza en que el futuro de la economía mexicana será más prometedor, que subió dos unidades.
Mientras que su opinión acerca de un mejor funcionamiento de la economía del país y de sus finanzas personales respecto a los 12 meses anteriores, repuntó 1.9 unidades, así como la idea de que la situación económica al interior del hogar será más próspera en el futuro, que se alzó 1.2.
De enero a junio, la confianza de los consumidores mostró un detrimento en varios componentes, julio se convierte en el primer periodo donde el INC muestra a nivel mensual porcentajes positivos.
En comparación con el año pasado, las cifras anuales sin estacionalidad del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) reflejan una disminución de 0.4 unidades, debido a que los ciudadanos se encuentran más negativos sobre el presente de la economía y su poder adquisitivo, con una caída anual de 4.4 y 1.0 por ciento.