Dobleces

Acorralado por su pasado
Israel Mendoza Pérez
@imendozape
El perfil bajo mantenido por el senador Javier Corral, en temas de justicia, tiene un trasfondo oscuro por los pendientes de sus excolaboradores, durante su etapa de gobernador de Chihuahua. Su gobierno dejó pendientes financieros y, ahora, su pasado lo persigue. Hace unos días, Arturo Fuentes Vélez, exsecretario de Hacienda durante su gobierno fue declarado prófugo de la justicia, luego de que un juez federal revocara los amparos que lo protegían de tres órdenes de aprehensión.
Al exfuncionario clave en el manejo financiero en el gobierno de Javier Corral, según, la Fiscalía Anticorrupción estatal lo acusa de peculado y uso indebido de atribuciones por presuntos desvíos que sumarían 743 millones de pesos, relacionados con la contratación irregular de un crédito, pagos indebidos a un despacho privado y la transferencia de recursos recaudados como impuesto sobre nómina.
Pese a que había obtenido suspensiones que le permitían comparecer voluntariamente, Fuentes Vélez incumplió con esa obligación. En uno de los procesos, incluso informó a un juzgado que había decidido no presentarse “por convenir a sus intereses”. Ahora, con la revocación de los amparos, la autoridad quedó en condiciones de ejecutar las órdenes de captura.
Mientras uno de sus exfuncionarios se mantiene prófugo, en la Ciudad de México, Gema Guadalupe Chávez Durán, quien fue fiscal Anticorrupción durante el gobierno de Corral, logró colarse a una posición estratégica en la Fiscalía General de Justicia capitalina. En febrero fue designada Coordinadora General de Investigación de Delitos de Género y Atención a Víctimas, cargo desde el que supervisa siete fiscalías especializadas, incluidas Feminicidios, Trata de Personas y Violencia Familiar.
Su nombramiento no fue fortuito. De acuerdo con versiones periodísticas, Corral fue al artífice de su llegada. Ella traía una cauda de fuertes acusaciones de su trabajo anterior, ya que se le señaló de proteger a integrantes del círculo cercano de Corral, incluso ante denuncias de corrupción.
Desde su nuevo cargo en la fiscalía local, Chávez Durán consigue reuniones privadas con abogados penalistas de alto perfil, como Gabriel Regino.
Su trayectoria también ha estado rodeada de controversias: durante el juicio en Estados Unidos contra Genaro García Luna, Jesús “El Rey” Zambada, mencionó su nombre y lo señaló de supuestamente haber recibido sobornos cuando era funcionario de seguridad en la capital, algo que él niega. En un video, Regino dice que su nombre salió a colación “por el contexto” pues se pretendía vincular a “otras personalidades” y que así es la política, así son los procesos penales.
Otros abogados que, según estas mismas fuentes, sostendrían reuniones con Chávez Durán son Adrián Arellano Regino y Ricardo Mac Gregor, socios del despacho Vega Mac Gregor Arellano, especializado en delitos de cuello blanco, así como Pablo Héctor Ojeda Cárdenas, exsecretario de Gobierno de Cuauhtémoc Blanco, en Morelos, señalado por presuntamente operar empresas fachada ligadas a esquemas de lavado de dinero.
Estas supuestas reuniones suscitan preocupación, pues el riesgo es evidente: desde la coordinación que encabeza, Chávez tiene acceso a información privilegiada. Y en esto, el senador Javier Corral se mueve en sigilo para tener a su grupo político protegido y evitar que su nombre se convierta de nueva cuenta en un sinónimo de escándalo.