Exigen a Jacobo dejar fiestas y tapar baches
Norma Ramírez
Los automovilistas de Piedras Negras enfrentan a diario un verdadero calvario: calles llenas de baches, socavones y vialidades deterioradas que no solo complican el tránsito, sino que provocan costosos daños mecánicos. A esto se suma el creciente malestar ciudadano ante lo que perciben como una administración más interesada en eventos y propaganda que en atender las verdaderas necesidades.
Durante su campaña, el hoy alcalde Jacobo Rodríguez presumía en redes sociales cómo él mismo tapaba baches. Sin embargo, ya en funciones, sus publicaciones ahora se centran en anunciar festividades, mientras las calles siguen empeorando. Justificaciones como culpar a gobiernos anteriores o pedir más tiempo ya no convencen a una población cansada de esperar.
En una reciente conferencia, la Dirección de Urbanismo y Obra Pública presentó supuestos avances en bacheo. El alcalde anunció la compra de una máquina que, según dijo, tapará baches en 7 a 11 minutos, así como la adquisición de un material asfáltico con una vida útil de hasta 20 años. Pese a esto, la ciudadanía sigue sin ver mejoras tangibles.
Rodríguez también informó que quienes hayan sufrido daños en sus vehículos a causa de los baches pueden solicitar apoyo para reparaciones en la Presidencia Municipal. La propuesta fue considerada tardía e insuficiente por ciudadanos que ya han gastado en composturas que pudieron evitarse con mantenimiento preventivo.
Grupo Región realizó un sondeo en el que decenas de habitantes expresaron su frustración. “Cada 50 metros hay un bache”, dijo un ciudadano. Otro advirtió: “Es un peligro; deberían arreglarlos antes de que ocurra una desgracia”. La opinión fue contundente: menos fiestas, más atención a las calles.
El descontento creció tras un live en redes sociales donde el alcalde preguntó si preferían drones o cohetes para las fiestas patrias. La respuesta fue inmediata: “¡Mejor tapa los baches y socavones!”. Las reacciones dejaron en evidencia el desgaste en su popularidad.
Los daños derivados de los baches son costosos. Talleres locales estiman que una reparación completa de suspensión puede ir de 5,000 a 12,000 pesos, mientras que en autos de gama alta puede alcanzar los 30,000. Una llanta nueva ronda entre los 3,000 y 5,000 pesos, afectando directamente la economía familiar.
A los problemas viales se suman deficiencias en el alumbrado público, agua potable y el mal estado de banquetas en diversas colonias. “Piedras Negras parece una luna llena de cráteres”, ironizó un conductor. Para muchos, el abandono de los servicios básicos refleja la falta de enfoque en las verdaderas prioridades.
La reciente encuesta nacional de Consulta Mitofsky, publicada por El Economista, refuerza este sentir. Jacobo Rodríguez tiene aprobación de 45.5%, ubicándose en el lugar 93 de los alcaldes evaluados y entre los tres peor calificados de la frontera.
Mientras tanto, la exigencia ciudadana se mantiene firme: menos discursos, menos festivales y más acciones. “Queremos una ciudad funcional, no una fachada bonita en redes sociales”, sentenció una madre de familia entrevistada en el centro.
