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23 de junio de 2025
Opinión

Convicciones

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  • junio 23, 2025

La reactivación de la Policía Federal

Rubén Aguilar Valenzuela

El general de división Carlos Demetrio Gaytán Ochoa (Ciudad de México, 1949), en esta novena conversación continúa con el tema de la Seguridad pública, de la que hemos hablado en los dos anteriores encuentros, y ahora se centra en lo que debería hacerse para contar con una Policía Federal Preventiva, de la dimensión y la calidad que exige la realidad del país.

Parte, en sentido contrario a lo que ahora es la estrategia de Seguridad Pública del gobierno federal, que queda en manos de la Guardia Nacional (GN), que para él debe dedicarse a la Seguridad Interior, de la necesidad de fortalecer a la Secretaría de Seguridad Pública, que debe ser una prioridad estratégica, y para ello urge restructurar la Policía Federal Preventiva, que tiene que depender de ella.

Quien fuera subsecretario de la Defensa sostiene, que para volver a reconstruir a la Policía Federal Preventiva, en un proceso acelerado, se debe reclutar a los efectivos entre:

 

  • Voluntarios de las Fuerzas Armadas, bajo la premisa de mantener sus beneficios de seguridad social, adquiridos en las Fuerzas Armadas. Lo que a su vez posibilitará que, una vez realizado el cambio de Fuerzas Armadas a Corporaciones policíacas, dichas Fuerzas Armadas cubran sus plazas.
  • Voluntarios civiles que, cubriendo un perfil determinado, y previa su formación profesional, pasen a formar parte de los cuerpos de seguridad pública.
  • Jóvenes que, por cualquier circunstancia, no pudieron ingresar a la preparatoria o Universidad. Bajo el compromiso de aprovechar el mecanismo de educación a distancia, con apoyo de sus corporaciones, que les permita terminar esta fase de su preparación académica. Para lo cual firmarían un contrato por tres años de servicios en la policía respectiva, mismo que podría renovarse hasta por tres ocasiones consecutivas.
  • Desplegando comisiones reclutadores en áreas tanto urbanas como rurales, para captar jóvenes en edad productiva.
  • Regularizando cuerpos de seguridad comunitarios, organizando, equipando y adiestrando a personal que cubra perfil, de los grupos ya existentes, que fueron desaprovechados por administraciones pasadas, lo cual generó un efecto contrario al que originalmente se pretendió alcanzar. Es decir, se sumaron a transgresores de la ley, o, en el mejor de los casos, subsisten al margen de la misma.

 

Y también que es necesario, dice el doctor en Alta Dirección, “profesionalizar a las policías estatales y municipales, para contar con cuerpos policíacos capaces, que requerirá de un proceso largo, sin contar con el costo respectivo. Pero será posible, recurriendo al apoyo de las Fuerzas Armadas para realizar el reclutamiento selectivo; adiestramiento básico individual; inducción de valores axiológicos; y el empleo de sus instructores e instalaciones. Campos todos ellos, en los que las Fuerzas Armadas cuentan con una muy considerable experiencia.”

En su opinión, lo anterior es posible con voluntad política y “mediante convenios entre las instituciones, involucradas, así como entre los Estados y la Federación. La formación estrictamente técnica policial y desde el punto de vista del conocimiento jurídico-legal, tendrá que contratarse con especialistas nacionales y/o extranjeros, ya que el Ejército no forma policías, forma soldados”.

 

@RubenAguilar