Rebasa a la Laguna miles de migrantes
VÍCTOR BARRÓN
En opinión de Eduardo Anaya Sanromán, sacerdote jesuita y colaborador del Centro de Día para Migrantes “Jesús Torres Fraire”, lo ocurrido la semana pasada en Torreón, donde miles de migrantes quedaron varados por días tras suspenderse el recorrido de trenes de carga en el país, puso de manifiesto la necesidad de sumar esfuerzos a nivel de los organismos de la sociedad civil, autoridades y ciudadanía.
No obstante, de prolongarse el fenómeno por varios días más, La Laguna podría quedar rebasada ante la dimensión del apoyo que esto implicaría.
“Hemos estado al punto del colapso por el tema de la hidratación, la alimentación, el lugar de descanso para los migrantes.
“Pero afortunadamente con la coordinación que hemos tenido con autoridades y sociedad civil, se ha salvado”, expresó.
Y es que mientras más de mil 500 migrantes aguardaban el restablecimiento del transporte ferroviario de carga rumbo a la frontera con la Unión Americana y quienes pudieron seguir su recorrido el viernes, el flujo extraordinario sigue en Torreón y cientos de personas en esta condición siguen arribando a esta ciudad que es punto clave en cuanto al cruce de rutas de trenes.
“Considero que si esto se prolongara otros dos días, tres días más, no sé si lograríamos atenderlo; es decir, si los trenes de Ferromex volvieran a decidir detenerlos, fracasaría la cuestión”, subrayó.
El sacerdote mencionó tres de los centros acopio disponibles para que la población haga llegar sus donativos en especie y son la Parroquia de San Judas Tadeo, Centro de Día para Migrantes y Casa Ínigo.
